¿Deben Mario Kart y Super Smash Bros. tener DLC?

Después de la piratería, sin duda el mayor «flagelo» de la industria, los desarrolladores de videojuegos señalan al mercado de los juegos usados como un problema serio. El problema es que el desarrollador percibe un porcentaje de la venta de un juego nuevo, pero la venta de un juego usado no les representa nada y evita que la persona que compra usado, obviamente, compre nuevo, así que el desarrollador «pierde» dinero.

Mucho se ha propuesto sobre cómo vencer esta tendencia y algo es claro: el desarrollador tiene herramientas para ayudar a mitigar esta tendencia en la forma de contenido descargable conocido con las siglas DLC. Ojo que no estoy diciendo que el DLC debe ser pago, esa es otra discusión. En su esencia el DLC es la oportunidad de experimentar un poco más de un universo hasta la larga espera que supone una secuela.

Y esta oportunidad de seguir visitando un universo ya conocido, es la que mantiene un juego vigente después de su lanzamiento de modo que las personas que lo compraron no ven la necesidad de venderlo y así los compradores tardíos del juego se ven con que deben comprarlo nuevo y de esa manera le continúa llegando dinero al desarrollador. Cuando la tendencia arrancó, créanlo o no, el DLC siempre era gratuito (y de hecho en los juegos para computador esa sigue siendo la norma) Lo que pasó fue que algunas compañías empezaron a cobrar y se dieron cuenta que los usuarios estaban listos a pagar así que en las consolas se volvió costumbre.

Nintendo no ha sido del todo ajeno al DLC. Si bien siempre han defendido que el DLC no puede ser una manera de cobrarle al jugador lo que el juego inicialmente debería haber incluido (algo muy común con los DLC del día 1), la compañía ha defendido la teoría de ver la reacción de los jugadores frente al juego y crear DLC que se ajusten a lo que los jugadores quieren.

Así para New Super Mario Bros. 2 Nintendo ofreció paquetes con niveles extras, algunos de ellos con una alta dificultad ya que eso pedían los usuarios que habían comprado el juego. Pikmin 3 también ofreció nuevos mapas para su modo multijugador.

Así que cabe preguntarse ¿podría Nintendo usar DLC en los juegos más esperados de este año?

Mario Kart 8

Mario Kart es una franquicia atípica en el mercado porque vende unidades por muchos meses después de salir del mercado, lo que Nintendo llama juegos «evergreen» (siempre verdes). Así que inicialmente la idea de DLC para alargar su vida no aplica.

Pero este es el tipo de juego que se beneficia con DLC pago. El equipo de Mario Kart solo saca un juego por consola y como alterna entre la versión portátil y casera, el siguiente juego para tener en la TV podría demorar ¡6 años!. Muchos preferirían pagos espaciados para hacer esos años de espera más cortos.

El DLC de Mario Kart podría enfocarse en algo tan sencillo como ofrecer pistas retro que inicialmente no se ofrecían o personajes nuevos, incluso podrían empaquetarlos como una Copa completamente nueva.

Super Smash Bros.

El DLC en los juegos de pelea es una propuesta mucho más delicada que en otros géneros porque puede verse malinterpretarse como que hay que pagar para ganar. Sin embargo esta ha sido la modalidad que se ha impuesto en otras franquicias como Street Fighter y Killer Instinct.

Sin embargo es en Super Smash Bros. donde quizás tiene más sentido utilizar DLC porque no es un juego «evergreen» y al contrario es un juego que alcanza muy rápidamente su tope de ventas. Una manera teórica de darle más piernas es ofreciendo nuevo contenido.

Pero por las razones antes expuestas creo que el DLC debería ser gratuito y de nuevo ajustado a lo que los fanáticos pidan. Sin embargo esto tiene un gran problema, por ahora, y es que Masahiro Sakurai, el líder del juego, se ve muy adverso a este tipo de posibilidades y menos a que otros continúen su trabajo.

Eso sí, aún sin DLC parece que la versión de la 3DS y la Wii U tendrán bastante contenido.

Nintendo siempre ha sido vista como una compañía atrapada en pensamientos arcanos, imposible de entender qué es lo que el mercado quiere. Pero las circunstancias pueden hacer que esto cambie y sus fanáticos posiblemente están dispuestos a responder. Después de todo ¿quién no quiere un poco más de Mario Kart y Super Smash Bros. así sea por un pequeño precio?