Final Fantasy Type-0 – La reseña

Porque un grupo de adolescentes también puede salvar el mundo.

Final Fantasy ha sido una de las sagas de videojuegos más conocidas en la industria, sus apasionantes historias y sus inmersiva jugabilidad han inspirado a muchas generaciones de gamers. Entre todas las historias de Final Fantasy que han salido, pocas se han quedado fuera de llegar a occidente; Type-0 fue una de esas joyas que afortunadamente podemos apreciar con grandes novedades como su adaptación a las consolas de escritorio y gráficos de nueva generación, ya que en su versión del 2011 solamente fue un juego de PSP.

Type-0 está ambientado en el mismo universo de Final Fantasy XIII, esto significa que aunque sus hechos como tal no corresponden con este juego, toda la mitología es la misma. En el juego nos centramos en la vida de la clase Zero, un grupo de 14 colegiales que liderados por Ace luchan por proteger su reino y detener la invasión de un país vecino.

La clase Zero no es cualquier grupo de colegiales, es un grupo militar de élite que usa la magia y todo tipo de armas para lograr su cometido, también se tratan como hermanos entre sí y ven a su líder como una madre; además comparten un objetivo un tanto desconocido. Esto es quizá lo único que debamos saber de la intrincada historia de este juego que abordará toda clase de conflictos políticos y traiciones y que, al más puro estilo de la saga, también nos adentrará en los dramas personales de los protagonistas.

En el juego no solamente se enfocará en batallas, también nos contará apartes de la vida académica de los personajes y de su relación con el resto de la gente en el pueblo de Akademia (con k), aunque la historia de Type-0 se centra casi exclusivamente en tres personajes dejando de lado las historias personales de los otros 11 integrantes que tienen las típicas personalidades que vemos en los animes japoneses: hay un tipo duro, una chica inteligente, uno impulsivo, uno sentimental, otra chica ruda y uno misterioso.

Cada integrante de la clase Zero no solo tiene una característica distintiva y una personalidad propia, también cada uno domina un arma diferente que le da gran variedad al jugador para elegir un estilo de batalla a su gusto y para planear diferentes tipos de aproximaciones a las misiones que aparecerán.

En Type-0 el combate es muy rápido, siguiendo la propuesta de Final Fantasy Crysis Core es un action RPG en el cual el manejo de nuestra arma es clave; aunque nuestro equipo es de 14, nuestra party solo es de 3 personajes y solo podemos manejar a uno a la vez. Debido a su rápida acción, muchas veces no hay tiempo para pensar y debemos enfocarnos en el uso de armas durante el combate ya que usar magia nos durará poco lo que simplemente la hace pasar a un segundo plano

Akademia no solamente es el pueblo principal del juego, también es nuestro hub de operaciones donde conoceremos la historia de lo que sucede, hablaremos con otros personajes y además se nos asignarán las misiones secundarias. También encontraremos una granja de Chocobos, los cuales podemos aparear, y un campo para entrenar a nuestros personajes junto a otras localizaciones que prácticamente nos atarán a esta ciudad durante casi toda la experiencia de juego.

Cuando terminamos misiones, y al volver a Akademia, contamos con un tiempo límite que termina siendo un contador que nos impone el juego para realizar la siguiente misión; el tiempo se mide en horas –no reales– y se reduce a medida que realizamos acciones, esta mecánica nos da dos horas para profundizar en conversaciones, seis horas al salir de la ciudad y 12 horas para realizar misiones especiales; al finalizar el tiempo debemos ir inmediatamente a Akademia. Debo decir que esta mecánica nos ofrece de cierta forma la posibilidad de avanzar rápidamente en el juego dejando la historia de lado ya que también tendremos la posibilidad de evitar todas .

La aventura de Ace y compañía se desarrolla a través de una gran cantidad de secuencias y misiones, debemos tener en cuenta que muchas de las mecánicas del título fueron diseñadas para juegos móviles y en esta versión se nota claramente en el diseño de sus misiones. Muchas de estas consisten en acción rápida con momentos de tensión para luego encontrar un checkpoint, por esto mismo, hay poco espacio para acciones secundarias que quitan tiempo, como la exploración de los mapas o hasta encontrar y recoger ítems.

Eso sí, hay un tipo de misiones que no esperaba encontrarme, las tácticas para recuperar territorios, en las cuales deberemos planear nuestros movimientos y dirigir tropas para recuperar ciudades y territorios; este metagame rompe la monotonía del RPG tradicional ya que el manejo es totalmente diferente a las misiones tradicionales y tampoco usaremos nuestra party.

Una curiosidad de este juego es que es el primer Final Fantasy con calificación M, que va bastante bien para el título ya que aunque la trama central no es muy adulta, las secuencias de acción y cinemáticas sí resultan ser muy violentas; de hecho se nota la intención de los productores de que el juego explorara una ambientación un poco más oscura y más gris con matices de sangre y crisis, aunque si esperan gore van a encontrar poco.

Al avanzar la campaña se puede sentir que las misiones secundarias y el grindear se torna algo aburrido, ya que esto se logra saliendo al mapa del mundo el cual realmente no nos ofrece algún atractivo especial para explorar y, además, el juego solo nos permite llevar una misión secundaria, lo que nos obliga a estar caminando de un lado a otro yendo y viniendo a Akademia o algunas ciudades a entregar los quest que pocas veces dan objetos valiosos. Por otro lado, el juego deja de lado actividades tradicionales como el crafting y el proceso de mejora y modificación de magias está completamente simplificado comparado con otros juegos de la saga.

Después de muchas horas de juego, este título tiene la facultad de ponerte a querer saber más y más de sus personajes si has prestado la suficiente atención, las cinemáticas son bastante buenas para ser basadas en un juego de 2011, aunque el aspecto gráfico del juego quede un poco en deuda para ser lanzado en esta generación de consolas, quizá el componente de ambientación sea salvado por la buena banda sonora y la interesante historia.