Conecta con nosotros

Videojuegos

Final Fantasy XV – La reseña

La ambiciosa décimo quinta entrega de la saga ‘finalmente’ ha llegado, ¿Cumple sus promesas o es solo un viaje de carretera con peligros maximizados?

Publicado

el

Una de las propiedades intelectuales más queridas y respetadas desde hace ya cerca de tres décadas ha sido Final Fantasy, serie de juegos creada por Square en los ochenta (inspirada en Dragon Quest) y que en su momento ayudó a impulsar el género RPG. Es por eso que a los 29 años del lanzamiento de la primera entrega, Final Fantasy XV ha llegado con mucho recelo entre los fanáticos de toda la vida, que desean saber si la década de espera y sus constantes cambios –empezó siendo un spin-off de FFXIII– han valido la pena. La respuesta es sencilla: lo vale.

Final Fantasy XV es fiel al estilo narrativo de la serie, se mantiene en los parámetros del JRPG y está lleno de detalles para los fanáticos, pero también le ha abierto la puerta a nuevas generaciones de jugadores –sobre todo occidentales– que no están acostumbradas o siempre le han huido a este tipo de juegos. La frase “A los jugadores de siempre y a quienes hoy descubren Final Fantasy” aparece de entrada siempre que iniciamos el juego y esto, más que una advertencia, es una invitación a explorar el mundo que los desarrolladores han creado.

La fuerte influencia occidental del juego se empezó a sentir desde hace algunos meses cuando se conoció que Florence & The Machine y Steve Aoki estarían en la banda sonora del juego, marcas como Audi también estarían presentes y actores como Sean Bean y Lena Headey prestarían su voz para la película Kingsglaive. Más allá de esto, la interfaz del juego se ve muy similar a la de los RPGs modernos y las cinemáticas se comportan muy similar a las de juegos como The Witcher III.

En cuanto a jugabilidad quizá uno de los méritos por parte del equipo desarrollador es lograr que un RPG japonés se haya salido de su zona de confort y tome aspectos de juegos occidentales conservando su ADN. Por ejemplo, aparecen las decisiones “cosméticas” que alteran de cierta forma el momento del juego pero no la trama principal o la aparición de misiones secundarias de un momento a otro sin tener que ir a buscarlas a algún lugar.

El valor narrativo de Final Fantasy XV reside en el desarrollo de personajes: Noctis, el protagonista, tiene una gran química con Gladiolus, Prompto e Ignis, sus compañeros de viaje, amigos, maestros y guardianes. Sus frecuentes interacciones a lo largo de la aventura hablan de lo que al final se trata el juego: el viaje de unos amigos donde la pasan bueno, tienen discusiones, se toman fotos y, a pesar de su importante misión, siempre tienen algo que contar. Esto hace que los exageradamente largos paseos en auto se vuelvan divertidos, que recorrer el gran continente no sea tan aburrido y que el jugador se identifique muy de cerca con estos personajes. Los diálogos se sienten más como si fueran parte de una serie de televisión que las trascendentales frases de un animé. Cuando falta un compañero, sin duda se siente su ausencia momentánea.

Cada personaje tiene su propia afición y estas son fundamentales en el juego. La de Noctis es pescar, que servirá para algunas misiones y encontrar comida; la de Gladiolus es la supervivencia, que ayuda al jugador a encontrar mejores recompensas; la de Ignis es cocinar, ayudando a mejorar los atributos del equipo; Prompto ama la fotografía y prácticamente documentará todo el viaje. Estas habilidades también suben de nivel y desbloquean mejoras como en el caso de Prompto, que conseguirá más filtros de fotografía.

El argumento es tradicional de la serie y tiene muchos momentos que recuerdan anteriores entregas. En este caso el príncipe Noctis –el héroe– debe demostrar que es digno de su legado para poder salvar a su mundo de un malvado imperio. Como en todo Final Fantasy, esta historia está llena de giros argumentales y aunque la conclusión del juego no convence por completo, sorprende en el sentido de que suceden cosas inesperadas pero deja muchos cabos sueltos. Todo esto lleva a pensar que la historia fue corregida o modificada sobre la marcha ya que llegado un punto, la narrativa del juego es algo apresurada. Además, FFXV se centra tanto en sus cuatro protagonistas que deja de lado muchos personajes de los que se esperaba conocer más.

final-fantasy-xv-4

Aunque la mayor parte del tiempo Final Fantasy XV es un mundo abierto, el juego tiene varias etapas. En los primeros capítulos está restringido a una zona, posteriormente se abre el continente de Eos y en los últimos se vuelve un juego lineal (claro que se implementó una mecánica para volver al mundo abierto en esta etapa). El continente es basto pero no es tan diverso como se quisiera, las poblaciones que se encuentran son muy pequeñas y los ambientes pasan de ser zonas boscosas, a valles y desiertos principalmente. Eso si, está lleno de secretos que los jugadores tendrán que descubrir. Como curiosidad, en este juego no se permiten muchas libertades de otros como Skyrim o The Witcher III, Noctis no puede entrar al agua y tampoco se puede lanzar de grandes alturas.

Para completar la historia principal no hace falta realizar muchas misiones secundarias, y tampoco explorar todo el mapa. Hay muchas locaciones que pasarán desapercibidas para el jugador que solo le interese conocer la campaña, por lo que se siente algo desperdiciado el mundo. Eso si, el juego también parece diseñado para que este carismático mundo toque fibras del jugador, una vez completados ciertos eventos, se siente la necesidad de volver a completar misiones e historias inconclusas.

FFXV deja de lado mucha de la mitología de antaño, ahora las invocaciones tradicionales son mínimas y están sujetas a ciertas condiciones, el combate se centra en el distinto uso de armas dependiendo del rival en cuestión y el uso de magia se enfoca solamente en cuatro tipos distintos elementales. Para golpear solo hace falta mantener presionado un botón y para defenderse y esquivar otro, eso si, hay varias combinaciones y el Ataque Lux, le da mucha dinámica al sencillo sistema de combate. El aumento de niveles es rápido ya que realizando misiones secundarias se consigue mucha experiencia, y a pesar de que el jugador no tiene control sobre qué atributos mejorar, si tiene acceso a un árbol de habilidades que permite realizar mejoras.

final-fantasy-xv-5

Casi todo el viaje se realizará en el Regalia, un vehículo convertible que se podrá ir mejorando hasta el punto que vuele. En este carro se podrá sintonizar prácticamente toda la banda sonora y la de los otros Final Fantasy. Otro medio de transporte fiable que funciona mejor que el caballo de muchos RPG son los Chocobos, que en esta entrega son relativamente fáciles de conseguir y el montarlos por mucho tiempo hace que aumenten su nivel y hasta ayuden en batalla.

Dentro de las misiones secundarias hay unas muy importantes que son los desafíos de cazador, donde se tendrá como objetivo ir a eliminar feroces bestias o enemigos formidables que requerirán para derrotar no solamente buen nivel y armas, sino astucia y dominio del terreno. Es aquí donde el sistema de combate se siente completo y donde aparecen las batallas más épicas del juego, ya que muchos de estos enemigos resultan ser bestias colosales. Lo mismo sucede al explorar calabozos buscando las armas de los antepasados, el juego sobresale por el diseño de estos, que mantienen la esencia de los juegos de antaño.

Vale la pena mencionar el apartado técnico del juego que es de resaltar, aunque tuvo dos parches en su lanzamiento, durante la reseña no hubo ningún problema técnico ni aparecieron glitches notorios. En la versión de PS4 que fue la reseñada, apenas hubo problemas de frame rate cuando habían muchas explosiones o secuencias de batalla. El detalle gráfico es muy bien cuidado, los cuatro protagonistas y los principales personajes de reparto tienen una gran cantidad de animaciones que muestran cómo se cuidó este aspecto. La ambientación funciona muy bien con el mundo propuesto y los ciclos de día y noche dan pie para espectaculares atardeceres que son captados por el lente de la cámara de Prompto.

Final Fantasy XV
8.5/10 Nota
En resumen
Final Fantasy XV es un muy buen juego que logra cumplir las expectativas de los fanáticos. Noctis es un acertado protagonista y el mundo creado para la historia transmite la esencia general de la aventura. Todavía dista de ser un título perfecto y se siente un poco apresurado en algunas etapas, pese al largo tiempo de desarrollo. La dirección que ha tomado abre las puertas a un futuro brillante para nuevos Final Fantasy y sin duda es uno de los juegos del año.

Reseña realizada con una copia de Final Fantasy XV para PS4 provista por Square Enix Latinoamérica.

Haga clic para comentar

Deja tu comentario

Además no te pierdas