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[Opinión] Y después de todo… ¿vale la pena preordenar?

¿Es en realidad una buena idea preordenar videojuegos dados los problemas recientes en títulos Triple A?

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¿Es en realidad una buena idea preordenar videojuegos dados los problemas recientes en títulos Triple A?

Articulo pre-orden (8)

Los días de E3 2015 fueron días brillantes y llenos de optimismo, no solo fueron anunciados grandes títulos, sino que por primera vez las protagonistas del evento fueron las mujeres, tanto en nuevas IP como Mirror’s Edge Catalyst, ReCore y Horizon Zero Dawn, así como en las presentaciones de las compañías a cargo. No obstante, un evento desafortunado volvió a opacar el panorama de la industria recreando en mayor medida el bochornoso lanzamiento de Assassin’s Creed Unity.

La gran mayoría estábamos a la espera de Batman: Arkham Knight, el capítulo final de la saga que fue creada por Rocksteady y que supone el cierre de la historia del caballero de la noche. ¡Por fin después de mucho tiempo el juego llegaba a nuestras consolas o PC! Sin embargo, no todo podía ser tan bueno. Cualquiera que haya seguido el desarrollo de este título de cerca sabrá que fue retrasado más de dos veces; evidentemente, cada retraso solo buscaba pulir el juego para que brindara la experiencia deseada. Desafortunadamente, no fue así.

Una semana después del lanzamiento, los problemas en PC no cesan; caídas de framerate por debajo de los 10 cuadros dejan mucho que desear de un título Triple A, más si proviene de una compañía tan grande como Warner Bros. y más aún si la misma compañía tuvo inconvenientes no hace más de dos meses con otro esperado lanzamiento, Mortal Kombat X.

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Está claro que Batman: Arkham Knight para PC es la versión “inferior” frente a las de PlayStation 4 y Xbox One; sin embargo, no se trata de quién es mejor o peor, sino lo que significa en sí el trato a una comunidad que espera un producto de calidad. Directamente esto es responsabilidad de Warner Bros. por delegar el título a Iron Galaxy, un buen estudio pero con mala suerte, pero también me hace pensar en una práctica que ahora es tan común que ya se ha vuelto una mala tradición en las compañías y compradores: las preordenes.

No cabe duda de que la mayoría de usuarios de PC que adquirieron Batman: Arkham Knight se han sentido estafados por la pobre calidad del producto que han recibido, más si fueron algunos de los que reservaron con anterioridad una de las tantas ediciones con algún contenido adicional (momento en el que vale la pena recordar que una de estas fue cancelada y que el lanzamiento de la otra fue pospuesto indefinidamente).

Las preordenes surgieron en un momento en que la industria de los videojuegos creció exponencialmente, esto en principio aseguraba que los usuarios pudieran acceder a una copia de su título favorito a tiempo antes que las existencias se agotaran; sin embargo, el modelo pasó de utilizarse en ciertas franquicias a implementarse en cada título Triple A en el mercado. Aunque suena de maravilla asegurar una copia con anticipación, no lo es si tenemos en mente los defectos de la pasada y la actual generación.

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Cada vez los títulos están más “rotos”, imperfectos si se puede decir. Día a día en los medios especializados nos ocupamos de informar a la comunidad cuándo saldrá el parche para X o Y título, eso sin olvidar que ahora es mandatorio la aplicación del parche de día uno. Es cierto que los títulos ahora son más grandes y más ambiciosos, pero no por ello debemos pasar por alto la calidad, ¡por dios, estamos pagando por ello!

Poco a poco las compañías han hecho del modelo de preorden algo más común, una evidente reacción al éxito que tienen sus reservas cuando es anunciado un juego y eso está mal. Es cierto que muchas ediciones incluyen contenido exótico que luego será imposible conseguir, al menos por un precio razonable, como la edición Songbird de Bioshock Infinite, pero no quita el hecho de que se está adquiriendo un producto que NO está finalizado.

No saber nada sobre un título que estamos comprando tiene más implicaciones negativas que positivas, de hecho, es comprar un producto SIN conocer el resultado final. Hay casos nefastos como Aliens: Colonial Marines, un juego que no solo fue un fracaso comercial, sino que también fue pobremente desarrollado; así como hay otros que quizá puedan mejorar con el tiempo, como Halo: The Master Chief Collection, Driveclub e incluso Assassin’s Creed: Unity.

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Ahora, ¿qué tienen en común estos lanzamientos? Fuera de promesas rotas, inconformismo. Excluyendo Aliens: Colonial Marines, del que ya quedó claro que fue un error de la humanidad, los otros títulos alimentaron sus ventas con promesas de un servicio impecable y una experiencia sin igual; sin embargo, el gancho definitivo para atraer compradores son los elementos adicionales que se pueden obtener, sea una estatuilla, una misión adicional, el acceso temprano a un contenido “exclusivo” o hasta una apariencia extra para el protagonista.

Uno de los errores más comunes a la hora de preordenar un título es verse seducido por el contenido adicional más que por el contenido que tiene el juego en sí, como le sucedió a muchos con Batman: Arkham Knight. Pongámoslo en perspectiva con un simple ejemplo: nadie va a comprar un par de zapatillas por el segundo par de cordones que vienen incluidos a sabiendas de que su calzado no está finalizado. Obvio, no se pueden comparar dos industrias completamente diferentes, pero con esto queda claro que sea cual sea el producto que queramos comprar, lo adquirimos si su calidad está a la altura de las expectativas.

Como usuarios tenemos la perspectiva de que no tenemos el poder sobre los productos que vemos en el mercado, pero en realidad es todo lo contrario, solo que debemos pensar con cabeza fría antes de cargar una nueva preorden a nuestra tarjeta de crédito. Una de las soluciones más obvias es dejar de preordenar videojuegos porque sí, incluso de comprarlos “por instinto” por su apariencia o reputación, ya que lo realmente importante a la hora de comprar es formar criterio con base en nuestros gustos y quiénes están a cargo de lo que estamos por adquirir.

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En sí el sistema de preorden no es una mala opción para los gamers, no obstante, permitir que sea una herramienta de medición para las compañías es una mala idea. No solo recaudan dinero a costa de un producto inexistente y fragmentan la comunidad a partir del contenido, sino que desconocen si pueden cumplir las metas establecidas, lo que puede llevar a una catástrofe incómoda para ambas partes. Para generar un cambio significativo hay que cambiar la forma de pensar, es decir, no anteponer el contenido adicional del título de moda a la calidad general de todo un producto.

Es importante seguir de cerca los lanzamientos que nos llaman la atención o ¿de qué otra forma sabremos lo que prometen?, pero es igual de importante no dejarse llevar por la emoción o hype, ya que es la forma más fácil de caer en un producto que puede no ser de nuestro agrado. Solo podemos exigir calidad cuando demostremos que como comunidad, sin importar la plataforma, no caemos en cualquier trampa comercial.

Hay que ver la relación entre compañía y consumidor como una doble vía en la que podemos colaborar al crecimiento de los equipos creativos y sus proyectos, a la par de estar a gusto con el producto que han lanzado al mercado. Como referencia podemos tomar CD Projekt Red, que pesar de sus problemas en el lanzamiento de The Witcher III: Wild Hunt, fue uno de los estudios que más cerca estuvo de la comunidad para escuchar sus demandas y sugerencias para el título.

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En conclusión, ser paciente tiene sus ventajas y es una de las herramientas que tenemos a nuestra disposición para generar un impacto valioso en la industria, más allá de lo que significa comprar un videojuego. Preordenar es una de las cosas que poco a poco deberían ser menos comunes ya que los artículos de colección están diseñados para aquellos que realmente los quieren y los pueden disfrutan, más no porque sea la única medida para obtener primero esos cinco minutos de juego adicionales que después de un tiempo estarán disponibles en la tienda digital.

2 Comentarios

2 Comments

  1. Sir Laguna

    3 de julio del 2015 at 23:07 pm

    Y después de todo… ¿vale la pena preordenar?

    – No.

    (Fin del artículo).

  2. Zyx

    5 de julio del 2015 at 19:21 pm

    No vale la pena. Siempre espero unas semanas para verificar que el juego si es lo que voy a esperar y disfrutar. Aunque Meta Gear the phantom pain y Uncharted 4 no los preordenare, pero si los comprare inmediatamente.

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