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CHAPPiE – La reseña

El director de Distrito 9 y Elysium nos trae CHAPPiE, la historia de un robot aprendiendo a vivir en un mundo hostil ¿Está a la altura de las expectativas?

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HAPPiE es un bello y genial desastre cinematográfico, una combinación de personajes, tono, guión y detalles extravagantes que simplemente no debería funcionar, pero que gracias a un robot carismático y al talento del director para los elementos visuales puede terminar convertida en un clásico de culto y ser recordada con cariño.

La historia nos traslada a un futuro cercano en Johanesburgo donde una fuerza robótica ha sido adicionada al departamento de policía; como consecuencia, el crimen en la ciudad ha bajado a niveles récord, pero no es suficiente para el programador de estos robots, que ha creado una inteligencia artificial capaz de aprender y pensar por sí misma. Esta nueva personalidad, llamada Chappie, queda en manos de un pequeño grupo de criminales y resulta siendo usado y manipulado por todos a su alrededor.

Como es de esperar, el buen Chappie es el centro de la trama y el que esta película le guste a alguien depende totalmente de que el protagonista les agrade y puedan sentir empatía con él. Afortunadamente, el estupendo trabajo de efectos especiales ha creado un personaje absolutamente creíble del que nunca dudamos que realmente “está ahí” con los demás actores, ademas, el actor Sharlto Copley lo dota de mucha personalidad con su trabajo de voz y de captura de movimiento, que nos convencen de que este robot es realmente un jovencito aprendiendo sobre el mundo.

Y es que básicamente Chappie ES un niño, es un chico que apenas está aprendiendo sobre el mundo y sobre su propia naturaleza, que depende de sus “padres” para sobrevivir y que hereda sus gestos, forma de hablar y actitudes. No hay que escarbar mucho para ver que una de  las intenciones principales del film es mostrarnos a diferentes personas “criando” e influyendo en el robot para que sea la personas que ellos quieren: su creador trata de demostrar que una inteligencia artificial puede ser un ente artístico, su “padre” quiere convertirlo en un arma que le ayude a cometer crímenes y su “madre” simplemente quiere que él mismo decida lo que quiere ser… pero no solo estamos viendo a este niño crecer, sino que parece que estamos viendo las cosas a través de los ojos de un niño, y eso puede ser un problema.

Hay un momento en el film en que Chappie enciende el televisor y se pone a ver He-Man y los amos del universo y a imitar lo que ve en pantalla. Es un momento muy adecuado para este film ya que el desarrollo y las motivaciones de todos sus personajes parecen sacados de una caricatura ochentera, pero arrojados en un mundo crudo y violento de pandillas, asesinatos y sabotaje industrial; esto crea un extraño efecto en el que resulta difícil tomarse en serio las acciones de los personajes cuando contrastan tan radicalmente con el mundo en que habitan. No sé si esto se deba a una decisión consciente del director (hay una escena en que Chappie llega donde su madre, herido, a hablarle de “las cosas malas que le hizo el hombre de la camioneta”, que se desarrolla con una seriedad absoluta) pero muy seguramente hará insoportable la película para todos aquellos que no logren conectar con nuestro robótico protagonista. Tampoco ayuda que a mitad del film la película trata de ponerse bastante metafísica al introducir temas sobre la naturaleza del alma y la conciencia, pero en lugar de dar tiempo para desarrollar tan importante tema, lo usa como una forma fácil de resolver de un modo demasiado apresurado y un poco anticlimático el final de la historia.

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Otro elemento difícil de asimilar es la fuerte presencia de la banda de rap-rave sudafricana Die Antwoord, pues no solo actúan en la película (y uso la palabra “actúan” por pura decencia, porque son terribles, aunque muy entretenidos de ver), sino que sus personajes usan sus mismos nombres escénicos, escuchan su propia música y usan camisetas de su propia banda sin explicación alguna. Su presencia es tan fuerte que terminan eclipsando por completo a otros actores como Dev Patel, Sigourney Weaver o Hugh Jackman y ha hecho que muchos definan la película como pura publicidad para la banda o como un video de dos horas de ellos, y aunque estas son acusaciones injustas, la verdad es que es bastante incomprensible; más fácil acusaría a la película de ser una publicidad de Sony, pues tenemos laptops VAIO (aunque ya no sean producidos por Sony, estos equipos se siguen asociando con la marca) y PlayStation 4 por todos lados.

¡Pero suficiente de cosas negativas! aunque ya lo mencioné antes, tengo que insistir en lo increíblemente real que se ve Chappie y los demás seres robóticos del film, como el MOOSE que está obviamente inspirado en el ED-209 de Robocop; y es que a nivel visual el director Neill Blomkamp es uno de los mejores del momento, como pueden atestiguar aquellos que hayan visto District 9 o Elysium. Aquí se mantiene el mismo estilo ya visto en esos filmes y, como es de esperar, también podemos disfrutar de un gran “enfrentamiento contra el jefe” lleno de acción y explosiones. No puedo esperar a ver lo que este director nos tiene preparado en Alien 5.

Si en su próxima visita al cine quieren pasar un rato entretenido, con un personaje adorable y disfrutar de grandiosos efectos especiales, les va a gustar CHAPPiE, pero la verdad es que este film pudo ser más, mucho más que simplemente eso.

Pueden leer más de Sir Laguna en su blog Siento un Ki Maligno, seguirlo en Twitter, hacerle preguntas frikis en Ask.fm o ver sus videos en su canal de YouTube.

1 Comentario

1 Comentario

  1. Diego Droguett

    9 de junio del 2015 at 9:35 am

    En el momento que vi la pelicula me imagine un juego tipo Call of Duty de robots como Chappie

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