Predecimos que tendrá pocos diálogos, una historia ambigua y muchas ruinas.
Una propuesta que les asegure a los desarrolladores mantener sus propiedades y un ingreso justo.
El creador de Ico, Shadow of the Colossus y The Last Guardian persevera en su legado de títulos únicos y monumentales.
Además del nombre y el género, lo único que resta esperar es que el futuro juego de Ueda no sufra percances en su desarrollo.
Solo ha pasado un año desde el lanzamiento de The Last Guardian, pero eso no significa que Ueda pueda darse el lujo de descansar.