Bethesda presiona legalmente a estudio indie por el uso de la palabra Fallout

Los desarrolladores de Fortress Fallout se verán obligados a cambiar el nombre del juego debido a la falta de recursos para enfrentar una demanda.

A veces se nota demasiado el peso de los grandes estudios sobre los pequeños y no precisamente en términos de calidad de los juegos o en las propuestas innovadoras, sino en la parte legal que a veces llega a ser excesiva. El caso de hoy es protagonizado por Zenimax Media (propietaria de Bethesda), compañía que demandó a un estudio independiente por el uso de la palabra Fallout. Esto no sería tan problemático si no fuera por el uso común de esta palabra en Estados Unidos y por las notables diferencias entre la gran franquicia y el pequeño juego móvil que tendrá que cambiar de nombre.

El estudio XReal se encuentra desarrollando un juego para móviles llamado (hasta ahora) Fortress Fallout. Todo iba relativamente bien hasta que Zenimax y Bethesda le extendieron una petición al equipo independiente encabezado por Howard Marks: deben dejar de usar de inmediato la palabra Fallout dentro del título y desistir de proceso de registro del mismo. Como decíamos, si fuera una copia completa del concepto de la franquicia no tendría tanto problema, pero el juego móvil ni siquiera guarda relación con el mundo postapocalíptico de Fallout.

Howard Marks lanzó como respuesta un video en YouTube donde explica que nunca fue la intención de su estudio relacionar el juego con la franquicia clásica; aún así ha tenido que acceder a cambiar el nombre de Fortress Fallout debido a que no tienen el músculo financiero para soportar una demanda contra una compañía experta en este tipo de situaciones. Sin embargo, mandó un amargo mensaje a Bethesda y Zenimax:

«Felicidades Bethesda. Ustedes ganaron. Nos vencieron. Nos mostraron quién es el que manda. Nos aseguraremos de que el juego no tenga ninguna relación con Fallout. No era nuestra intención desde el inicio. Pero bueno, lo cambiaremos.»

Recordemos que este no ha sido el único proceso legal donde una palabra común ha sido la protagonista. La misma Bethesda tuvo una disputa con Mojang sobre el uso de la palabra Scrolls en el juego de estrategia que este último estudio desarrolló; también podemos traer a colación el caso de King que intentó registrar el uso de las palabras Candy y Saga.

Fuentes: Polygon, Kotaku