¿Por qué BioWare decidió crear Mass Effect y no Star Wars: KotOR 2?

Para que una compañía sea exitosa y controle su propio destino necesita su propia IP… Aunque años más tarde cometa un error garrafal con la misma.

A través de un consistente especial publicado por Eurogamer, BioWare compartió una interesante pieza informativa sobre el desarrollo de Star Wars: Knights of the Old Republic, para la gran mayoría el mejor juego de la franquicia, a propósito del estreno de Star Wars: The Last Jedi. A través de una entrevista con el director creativo James Ohlen, la historia nos lleva al concepto inicial del juego y su eventual lanzamiento en 2005.

Aunque se pueden encontrar varios detalles por destacar en la entrevista completa, uno particularmente interesante señalado por Ohlen tiene que ver con el momento en que BioWare pasó de Knights of the Old Republic a Mass Effect. Ambos universos ficticios con una buena cantidad de seguidores.

El estudio actualmente trabaja en propiedades intelectuales licenciadas y originales, pero tras el lanzamiento de Knights of the Old Republic, decidieron dejar por un tiempo marcas populares como aquella de Star Wars y Dungeons & Dragons. Varios conceptos iniciales de un posible KotOR 2 fueron descartados a favor de crear un juego original como lo fue Mass Effect.

“Fue una decisión muy inteligente por parte de la compañía”, resalta Ohlen. Star Wars fue la piedra angular de Mass Effect, mientras que la experiencia con la serie Baldur’s Gate eventualmente llevó a la creación de Dragon Age.

Para que una empresa desarrolladora sea exitosa, necesita sus propias IP.

Algunas funciones de Knights of the Old Republic inspiraron varios elementos en posteriores juegos de BioWare. Por ejemplo, la nave Ebon Hawk que transporta al equipo de un planeta a otro en KotOR llevaría a inspirar el diseño del Normandy en Mass Effect y el campamento en Dragon Age: Origins.

“Queríamos que el Ebon Hawk fuese tu propio Millennium Falcon, lo queríamos como eje central del juego. Fue, esencialmente, tu hogar base. Funcionó muy bien para nosotros. Fue como un buen lugar para socializar con tus compañeros y hacer que el mundo se sintiera más grande de lo que realmente era.”

Todo fue alegría en aquel entonces, hasta la llegada de Andromeda.