Este artículo contiene ‘spoilers’ de Clair Obscur: Expedition 33 y explica a profundidad las implicaciones de sus dos finales diferentes. No recomendamos seguir leyendo si no han terminado el juego.
Aunque ya han pasado varias semanas desde que terminé este juego, no he podido dejar de pensar en su bella historia. Específicamente, no he podido sacar sus melancólicos finales de mi cabeza. No importa si eligieron el final de Maelle o el de Verso, es imposible no sentir un sinsabor tanto por sentir que una historia tan bella llegó a su final como por los tonos trágicos que conllevan ambas conclusiones. No es extraño terminar en lágrimas o llenos de furia por dentro tras ver lo que ha ocurrido y eso es genial. Son pocas las obras capaces de crear emociones tan fuertes en nosotros.
Pero esas mismas emociones también están creando una especie de cisma en la comunidad. Todos los fanáticos de Clair Obscur: Expedition 33 estamos del mismo lado a la hora de hablar sobre su maravillosa historia, atrapantes mecánicas de combate y hermosa música, pero los debates sobre “cuál es el mejor final del juego” o “cuál es el final ‘verdadero´” en redes sociales, foros y el subreddit oficial del juego suelen volverse mucho más agresivos. No es porque no se llegue a un consenso —eso sería ridículo en un caso como ese a menos que Sandfall Interactive diga que uno es canon y eso no ha pasado— sino porque hay una fuerte tendencia a “acusar” de ciertas cosas a quienes se ponen de un lado o del otro.

Si están leyendo esto es porque seguramente ya terminaron el juego y saben lo que pasa en ambos finales (y si no, les recomiendo fuertemente para y volver una vez lo hayan hecho). Pero vamos a hacer un breve resumen de todos modos.
¿Qué pasa en los finales de Clair Obscur: Expedition 33?
Cuando finalmente enfrentamos al ‘verdadero’ Renoir en Lumiere, ya sabemos que el mundo en el que estamos fue “pintado” y que los personajes viven en el interior de una pintura creada por la familia Dessendre, que lo ha convertido en un campo de batalla por su incapacidad de lidiar con la muerte de su hijo Verso. Si quieren leer más detalles sobre esto, los invito a leer mi análisis de la trama, temas y simbología del juego.
Maelle convence a su padre que no destruya la pintura para que los habitantes de Lumiere puedan seguir con vida y ella quedarse un tiempo con ellos. Pero Verso se da cuenta que es mentira, ella pretende quedarse en resto de su vida allí. Verso entra al ‘corazón’ del lienzo para destruirlo porque quiere que Maelle regrese al “mundo real” y haga un verdadero duelo por la muerte de su hermano, pero ella trata de impedirlo y se enfrentan. Aquí elegimos a qué personaje controlaremos en este último combate y es la opción que definirá cuál de los dos finales sacamos.
Verso
Si elegimos a Verso y ganamos la pelea contra Maelle, ella regresará al “mundo real” y todo el mundo creado en el lienzo desaparece. Lune, Sciel, Monoco, Esquie, los habitantes de Lumiere, los Gestrales, los Grandis y todo el continente son eliminados.
En el mundo real, vemos a la familia Dessendre en pleno reunirse ante la tumba de Verso para despedirse y Maelle tiene una visión de los amigos que perdió en el lienzo
Maelle
Si elegimos a Maelle y ganamos la pelea contra Verso, ella se queda viviendo dentro del lienzo y revive a todos los habitantes de Lumiere, no solo aquellos que fueron eliminados por la ‘gommage’ sino otros que murieron en otras circunstancias como Gustave y el esposo de Sciel.

Durante una de las charlas en el campamento, Verso le prometió a Maelle que iban a reconstruir la ópera de Lumiere para que él pudiera tocar allí. Un envejecido Verso se acerca al piano pero parece que no desea tocar.
Aunque la mayoría de jugadores parecen creer que Maelle usa sus poderes como ‘peintresse’ para obligar a Verso a tocar, otros interpretan el final como Verso simplemente reconociendo que «esto es una fantasía» y que Maelle sigue sin querer salir de ella.
¿Cuál de los dos finales de Clair Obscur: Expedition 33 es el verdadero?
Seré sincero. No voy a responder esa pregunta porque, honestamente, no importa. La conversación que hay al respecto en línea es mucho más interesante que tratar de adivinar cuál final seguirá la historia en una hipotética secuela.
Cuando un título tiene varios finales, no es raro que los jugadores discutan sobre cuál es el final canónico, sobre todo si no hay palabras oficiales al respecto de parte de los desarrolladores. Pero el caso de Clair Obscur: Expedition 33 es diferente. Los debates sobre el final que he visto no se enfocan tanto en cuál es la resolución real de la historia, sino en cómo entiende cada uno a cada final de acuerdo a su propia moralidad y lo que entendió del juego.
El corazón de este enfrentamiento filosófico que tiene tan dividida a la comunidad parece ser lo que entendemos como “real” dentro de los parámetros de este universo. Si simplificamos las cosas, podemos decir que “los habitantes del lienzo —incluyendo personajes como Lune, Sciel, Gustave y Esquie— no son reales, pero los miembros de la familia Dessendre sí lo son”, pero hay muchos elementos dentro de la misma historia y experiencia de juego que van contra ese supuesto hecho.
OK. Hablemos de hechos. Cosas que no están en debate y que son necesario tener claras para tener una discusión al respecto:
- Los pintores tienen la habilidad de crear mundos enteros dentro de sus obras y pueden “entrar” a ellas.
- La pintura en la que se desarrolla el juego fue creada por Verso cuando era niño y dentro de ella hay un fragmento de su alma.
- En medio del duelo por la muerte de Verso, Aline entró a la pintura de su hijo. Le “pintó encima” la ciudad de Lumiere llena habitantes, entre ellos copias de los miembros de su familia que gozaban de vida eterna.
- Buscando llevar a su esposa de regreso al “mundo real”, Renoir también entró a la pintura de su hijo y su enfrentamiento con Aline causó el ‘Cataclismo’. Él está intentando borrar a todas las personas de Lumiere, pero solo puede eliminar a quienes tienen más de cierta edad cada año debido a la resistencia de Aline.
- Al final del juego Alicia/Maelle le miente a su padre. Aunque le dijo que va a regresar al “mundo real”, pretende quedarse en el lienzo.
Muchas otras cosas, como el “funcionamiento” de la pintura, el Croma, el alma de Verso, cómo avanza el tiempo dentro de la pintura y demás detalles sobre cómo funciona este universo son solo suposiciones y aproximaciones basadas en lo que sabemos.
La vida sigue adelante: El final de Verso
No hay duda alguna de que el duelo es uno de los temas principales, sino el principal, de Clair Obscur: Expedition 33 y es por eso que muchos jugadores prefieren este final. Ofrece un “cierre” claro que va de la mano con el mensaje de que “la vida sigue adelante a pesar del dolor que causa la pérdida de un ser querido”.
Verso observa que Alicia (Maelle) va a cometer el mismo error que su madre: se va a encerrar en un “mundo de fantasía” en el que no tiene que lidiar con los problemas y el sufrimiento que le esperan en el mundo real. Él unilateralmente decide que el lienzo y sus habitantes —incluyéndose a él mismo— deben dejar de existir para que su hermana pueda sanar y continuar con su vida.

La escena de la familia reunida ante la tumba de Verso le da la razón. La vida sigue y el hecho de que estén todos juntos parece indicar que han comenzado a recuperarse. Alicia ve a los seres queridos que desaparecieron junto a la pintura, pero se desvanecen pronto, indicando que dejaron de ser parte de su vida y ya no son más que un recuerdo.
Tomando en cuenta todas las cosas que pasaron por culpa de la incapacidad de la familia Dessendre para enfrentar el duelo —incluyendo la tortura física y emocional de todo un mundo— este final parece adecuado. Los arcos narrativos de Verso, Alicia y el resto de miembros de la familia se cierran con un bonito y melancólico broche de oro… y sin embargo este final me deja un muy mal sabor de boca.
Mi problema con este final es que acepta sin cuestionamientos la idea de que el lienzo y todos sus habitantes “no son reales” y aunque nos deja despedirnos de Sciel y Lune, las reduce a un papel que no merecen: el de herramientas terapéuticas para una niña rica que ya cumplieron su cometido y serán desechadas.
Este final también presenta el Fragmento del alma de Verso, que toma la forma de un niño, como si fuera un ser torturado obligado a pintar. Cuando lo aleja del lienzo, lo muestra como si estuviera liberando al niño de Omelas. Pero hay elementos en el juego que demuestran que este no es el caso. Cuando hablamos con los reflejos del niño que se encuentran en diferentes niveles, queda más que claro que él ama este mundo y que no está siendo obligado a mantenerlo, sino que es parte natural de él.
Cuando algunos jugadores dicen que consideran a este el verdadero final de Clair Obscur: Expedition 33 otros les acusan de ser desalmados. De permitir que los personajes que amamos por tanto tiempo murieran. No estoy de acuerdo con estas acusaciones. Los ‘creyentes’ del final de Verso simplemente dan mayor importancia a la trama del duelo de la familia Dessendre y consideran que todos los demás elementos están construidos alrededor de este. Ven al lienzo y sus habitante como una metáfora de los peligros del escapismo, de buscar escapar de las emociones complicadas.
Pero considero que eso no es todo lo que son. Aunque el final del segundo acto del juego y todo el tercero se enfocan en los Dessendre, no podemos dejar de lado todo lo que vivimos al lado de Gustave, Lune y los demás. Aunque no acuso a quienes prefieren este final de “facilitar el genocidio de Lumiere” como han dicho algunos en línea, si creo que podrían tener una tendencia a deshumanizar más facil a otros. También creo que va contra la filosofía del juego de luchar “por aquellos que vienen después”.
Además, no es como si el otro final fuera perfecto. Dista mucho de ser el final feliz que algunos querrían ver.
Un mundo que merece existir, vidas que merecen ser vividas: El final de Maelle
Maelle está siendo egoísta. No hay duda de ello. Pero antes de hablar sobre sus motivaciones y los aspectos más terribles de su decisión, tenemos que hablar de lo que esto implica para el resto de habitantes del lienzo.
Tras la revelación que nos dice que todos los habitantes de Lumiere no son más que creaciones de Aline dentro de una pintura, yo seguía considerándolos reales. Más incluso que los Dessendre. Aunque por supuesto sentí empatía por lo que estaba sufriendo esa familia, su dolor nunca opacó para mi todo lo que vi suceder en Lumiere.
Aunque su existencia está contenida dentro de una pintura, estas vidas son tan reales como cualquier otra dentro de la ficción del juego. Los vemos sufrir, amar y perseguir sus deseos. La trama de Clair Obscur: Expedition 33 nos dice que no son reales, pero creo que es algo que hace a propósito para hacernos cuestionar nuestra propia definición de lo que es “existir”.
Esta no es la primera obra de ficción en la que vemos un “mundo creado dentro de otro mundo” que no es considerado real por “los de afuera” pero que nos demuestra que las vidas que vemos allí —sean simuladas o artificiales— son igualmente válidas, ricas y complejas. El mismo Fragmento del alma de Verso que mantiene este lugar está de acuerdo. Él mismo dice que, para él, “todo lo que hay en ese lienzo está tan vivo como lo que hay afuera”.

La familia Dessendre está sufriendo terriblemente, pero los habitantes del lienzo también. Una conclusión en la que unos —precisamente una familia rica, famosa y poderosa— puede resolver sus problemas a costa del sufrimiento de otros va en contra de mis creencias personales y por eso no puedo elegir el final de Verso. La decisión que el toma de borrarlo todo me parece profundamente egoísta, sobre todo cuando a él se le permitió un tiempo de vida muy largo del que no disfrutaron los habitantes de Lumiere.
Pero como dije al comienzo de esta sección, Maelle también está siendo egoísta, profundamente egoísta. Igual que hizo su madre, ella está evadiendo sus problemas del mundo real creándose un lugar feliz en el que las personas que ama están todas vivas y contentas. Hasta este punto, no puedo enojarme con ella. Si vuelve a ser Alicia, la espera un cuerpo lastimado que le dificulta la comunicación, una madre y una hermana que la culpan de la muerte de Verso y una guerra en ciernes. Aunque ella eventualmente puede encontrar felicidad en ese cuerpo, ella tiene otra vida completa que es igualmente válida y que le proporciona mucha más satisfacción. Personalmente, creo que tiene todo el derecho de decidir si quedarse en el lienzo o no.
Pero las cosas no queda ahí. Vemos también que ella está usando sus poderes de ‘peintresse’ no solo para traer de regreso a todos los habitantes de Lumiere que merecen seguir con vida, sino también a Verso — que había decidido no seguir existiendo más. Aunque quiero creer que las cosas van a estar bien, esta escena deja un tono de tragedia sobre el final del juego. Si interpretamos el final como que Maelle está obligando a Verso a tocar el piano, deja abierta la posibilidad de que Maelle se convierta en una especie de tirana. Sin embargo, en este punto del juego, es una posibilidad que prefiero sobre la alternativa. Ver de nuevo a Gustave con Sophie, ver a Sciel feliz al lado de su marido y a Lumiere prosperando me sacó lágrimas de felicidad. Si hay otra diosa que derrotar en el futuro, está bien.
Porque Maelle es una diosa. Aline lo era. Todos los Dessendre y todos los pintores lo son, incluso a pesar de que rechacen la idea de la divinidad.
La responsabilidad del dios creador
Siento que cuando hay discusiones en línea sobre los finales de Clair Obscur: Expedition 33, hay un tema muy importante que se deja de lado y es que los miembros de la familia Dessendre son dioses.
En este universo, los pintores tienen la capacidad de dar forma a mundos enteros, crear vida y controlar a sus creaciones. Si ponemos atención a los eventos del juego considerando a los Dessendre como un panteón, veremos que no se diferencia mucho de las tragedias griegas y sagas vikingas en las que los caprichos de los dioses causan caos en el mundo humano, sobre todo cuando deciden interactuar directamente con ellos.
La decisión de crear a Lumiere y sus habitantes nació del sufrimiento y egoísmo de Aline, pero al hacerlo también adquirió la responsabilidad de cuidar de esas vidas o al menos dejarlas existir y progresar. El conflicto entre los miembros de la familia y la incapacidad de ver a sus creaciones como algo más que “colores sobre un lienzo” no los deja ver que tienen una relación de divinidad con sus obras. Clea es la principal culpable de esto. Es tan incapaz de ver a estas personas como seres reales que es capaz de manipularlos a gusto. Lleno el continente de monstruos porque servía a sus propósitos sin importarle con cuántas vidas puede acabar. Clea, por supuesto, no es realmente “malvada” (¿o sí lo es?) y todos estos elementos sirven para definir a un personaje muy intrigante al que vemos muy poco, pero es la forma en que decide no ver a los habitantes de Lumiere como personas lo que de verdad me interesa.

No sé si es su propia mortalidad o sus problemas personales que les distraen, pero la verdadera causa de todos los problemas en el juego es la incapacidad de estos personajes de aceptar su rol como deidades. Solo Maelle —cumpliendo el cliché de la “diosa” que crece y vive entre sus “creaciones”— se da cuenta que Gustave y los demás están tan vivos como quienes permanecen fuera del lienzo.
Creo que en parte esto es una metáfora de cómo las clases privilegiadas (los Dessendre son, a pesar de todo, ricos y poderosos) deshumanizan fácilmente a quienes están “por debajo de ellos”. También sirve para analizar la relación del artista con su obra, pero ya hablamos de eso.
Entonces… ¿Quiénes tienen la razón?
Parte de mi quiere aprovechar mi posición privilegiada como autor de este ensayo para decir que el final de Maelle es el verdadero porque retoma los temas más interesantes del juego y les da un giro inesperado, pero eso es falso y lo diría solo porque es el final que me hizo sentir más feliz (o menos triste). La verdad es que ambos finales nos dan perspectivas imprescindibles sobre los eventos del juego y debemos ver antes si queremos una mayor comprensión de la obra de arte que es Clair Obscur: Expedition 33.
Con esta palabrería no pretendo dar por cerrado el debate sobre los finales del juego. Todos los jugadores tienen derecho a expresar su opinión sobre ellos y aunque no puedo evitar sentir que algunas posiciones al respecto son un poco cerradas, siguen surgiendo ideas e interpretaciones muy interesantes. Quiero que esas discusiones sigan, solo desearía que dejemos de acusarnos de ser “cómplices del genocidio” o de “fomentar el escapismo” por tomar una posición o la otra…
… al menos hasta que Sandfall Interactive se pronuncie y deje claro que el final de Maelle es el canónico, porque eso es lo que va a pasar… ¿Cierto?
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- Cómo sacar los dos finales (sin spoilers)
Considero ambos finales decepcionantes. No es una cuestión de gustos si no que ambos resultan contrarios a los personajes. En el final de Maella ella se comporta como una estúpida incapaz de sacrificarse y salir del cuadro para que todos sus seres queridos puedan seguir viviendo tanto dentro como fuera del cuadro. Si ella demostraba control su padre podría haber entendido que era innecesario destruir el cuadro y si bien de todas maneras lo destruía por lo menos Maella lo hubiese intentado. Respecto a que el alma de Verso sería esclavizada hasta la eternidad significa que todos los cuadros alguna vez pintados por la familia de Verso tienen pedazos de almas esclavizadas (osea poniéndonos filosóficos sería como todas las obras de arte reales). Además considero que el alma de Verso funcionaba como «Dios» o como un primer motor inmovil para la creación, papel que tranquilamente podría haber ocupado una Maella desde fuera del cuadro «liberando» el alma de Verso sustituyendola con una pedazo de su propia alma, sin embargo, nuevamente Maella muestra ser egoísta y tonta contrario a lo que durante todo el juego se nos enseño ya que ni siquiera evalua esta posibilidad. En defecto el final de Verso es también contrario a la evolución del personaje, nuevamente traiciona y actúa en contra de sus seres queridos para salvar a personas que le dieron la espalda justificándose en que eso es lo «verdadero» y nada vale vivir en una falsedad ¿Acaso la música que sale de su piano no es verdadera o el cariño que Esquier le brinda no es suficiente o la amistad de monoco o el amor de Sciel a su difunto esposo? La realidad es que me parecen finales mediocres para un juego tan complejo, minimo hubiese agregado un final donde Maelle se supere logrando sacrificarse por los demas huyendo de su adicción por lo «falso». Donde ella acepte que su vida real es fuera del cuadro pero que eso no significa que sus seres queridos dentro del cuadro tengan que dejar de existir ya que eso es realmente lo peor, las personas del cuadro no mueren si no que dejan de existir, no hay un «después de», Gustave nunca se reencontrará con Alice ni Sciel con su esposo solo es las nada misma. Para mi solo hay dos opciones para justificar esto o realmente Maella siempre fue una egoísta y nunca le importo sacrificarse por el bien común. Lo que daria a entender que se unió a la expedición 33 solo por ansiedad o aburrimiento como parecería comentar varias veces durante el juego, o en su defecto al final simplemente Maelle muestra un lado egoísta incapaz de sacrificarse realmente por los demás. El final da a entender que Maella pareciera incapaz de intentar vivir en un mundo «amargo» mientras sus seres queridos dentro del cuadro siguen viviendo, sin embargo, esto no tendría sentido y sería nuevamente contrario al personaje ya que al inicio del juego estaba dispuesta hasta de morir por otros. Ambos finales me parecen decepcionantes y en gran parte lo siento asi porque Maelle terminó decepcionandome. Ambos finales son vacíos y están desnudos de enseñanzas, ambos son el fallo de dos héroes que se quebraron por la tentación, incapaces de ser leña para el fuego de otros.