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La batalla legal entre Gearbox y Sega continúa

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Dos años después de su terrible llegada Aliens: Colonial Marines, sigue dando de qué hablar.

En abril de 2013 Roger Damion Perrine y John Locke demandaron a Sega y Gearbox por publicidad engañosa, todo debido al juego que estos supuestamente habían desarrollado. Puesto que durante todas las muestras y conferencias mostraron un título que no tenía nada que ver con el juego final que llego a todos los usuarios de Ps3, xbox360 y PC.

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El pasado mes de Junio parecía que llegaría un posible acuerdo, pero Damion Perrine nunca llegó a firmar, debido a que en ese momento era juzgado en Pennsylvania por tres cargos de asalto y amenazas terroristas, y se encontraba encarcelado, ocasionando que ambas demandas sean llevadas de manera separada. El miércoles tuvo lugar en los juzgados del distrito norte de California, la citación a los imputados.

Los abogados de la desarrolladora han asegurado que «Gearbox nunca tuvo que estar demandada. Se trata de una desarrolladora de videojuegos, no es la encargada de editarlo o venderlo. Durante un año, la firma ha cumplido en silencio las reclamaciones de los demandantes para que Sega, editora del juego y parte responsable de la comercialización, pudiese asumir la defensa de la demanda. Entendiendo que la publicidad, real o engañosa nunca fue parte de Gearbox, además que esta fuera de lugar las exigencias de los demandantes. Debido a esto la empresa puede exigir legalmente su salida del caso”.

Aliens colonial

Sin embargo los demandantes siguen asegurando que «cada vez que se mostraba en convenciones, ferias o exposiciones «gameplay real» se esperaba que eso fuera exactamente lo que comprarían en las tiendas, un juego innovador con unos elementos concretos y calidad específica. Por desgracia, lo que nunca llegaron a decir, ni a medios, fans, críticos, analistas o cualquiera persona del gremio es que el «gameplay» que presentaban en la campaña tenía muy poco que ver con el producto final que estaría disponible en el comercio». Recordemos que la misma desarrolladora canceló una versión prevista para WiiU a pocos meses de su lanzamiento, debido a la lluvia de merecidas críticas.

Steve Gibson, vicepresidente de marketing de Gearbox manifestó en medio del proceso legal que, “durante el desarrollo Gearbox gastó millones en ayudar a Sega a acabar el juego; nunca se recuperó el total de esas contribuciones y no se pudo reparar el daño», además insiste que para desarrollar el juego se usó el motor gráfico de Unreal licenciado por Epic, y ese ha sido el único motor usado por Gearbox para hacer el juego, al contrario de lo que muchos piensan nunca se hizo en un motor distinto al que teníamos disponible.

Gearbox ha sido muy enfático en que no hubo ningún tipo de bonificación por parte de Sega, puesto que “Las ventas fueron insuficientes para activar alguna de las bonificaciones, y el resultado fue que Gearbox no recibió ningún dinero extra por parte de Sega tras la puesta en venta del desastroso juego. Solo recibimos el pagos de Sega durante el desarrollo del juego».

Fuente: Pcgamer

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