Conecta con nosotros

Videojuegos

Wii U sigue perdiendo exclusivos a favor de Switch, el resucitador de juegos

Conversiones de títulos multiplataforma se benefician del formato portable de Nintendo Switch, de repente gozando de un renovado atractivo.

Publicado

el

Demasiados fueron los jugadores que dejaron pasar a Wii U, lo que básicamente causó un incrementado desinterés por la consola casera de Nintendo de octava generación, provocando unas excesivamente bajas cifras en ventas y el prematuro colapso que dio paso a Switch, mientras subsistía con poco menos de cinco años en el mercado.

En parte fue algo injusto para Wii U, la última apuesta de Nintendo que viera el fallecido presidente de la compañía, Satoru Iwata, una máquina que no precisamente estaba en su mejor momento, si es que alguna vez lo tuvo. La injusticia yacía en que su catálogo de juegos no sostenía la culpa por el destino del hardware. No era cuestión de falta de software interesante, sino de un sistema que nunca supo presentarse ante el público, comenzando por un nombre que no se alejaba mucho de su predecesor y que dejaba su mando principal con pantalla como si solo fuese un costoso accesorio.

Fue difícil, por no decir imposible, retirar esa errónea noción de los consumidores casuales, los mismos que en su momento lograron elevar a Wii como la consola más vendida y exitosa de Nintendo.

Por eso cuando el concepto de un sistema híbrido, entre portátil y casero, se lanzaba al mundo hace cerca de un año con el nombre de Nintendo Switch, el público entendió con mayor claridad que se trataba de lo mejor de dos mundos. La posibilidad de disfrutar muchos de los títulos antes exclusivos de plataformas caseras, entre ellos varios vistos en las de Sony y Microsoft, pero ahora en formato portátil.

Si algo nos ha enseñado Nintendo como buen rey en dicho campo, es que pocos juegos se gozan tanto como los que podemos llevar a todas partes y continuar en cualquier momento de ocio. De ahí que aunque como consumidores solemos jactarnos de las burlas hacia Skyrim por su omnipresencia en más de seis años de existencia, es innegable que el formato portátil revive la maravilla de juego que en verdad es.

Lo mismo aplica a títulos de una pasada generación como L.A. Noire o el anunciado Dark Souls: Remastered, también para Switch. Puede que las consolas rivales ofrezcan resoluciones impactantes y 4K por doquier, pero la portabilidad tiene esa particularidad de capturar tantos corazones como los protagonistas de Persona 5, que por cierto no caería tan mal en Switch y sería una factible opción para la versión definitiva de Atlus.

No fue solo a punta de juegos antiguos desarrollados por terceros, pues además de compartir el último juego de The Legend of Zelda originalmente desarrollado solo para Wii U, Breath of the Wild, Nintendo Switch reempacó el buen Mario Kart 8, le sumó todo el contenido descargable y le otorgó el factor que hacía grande a Mario Kart 7 en 3DS, la misma portabilidad de lujo.

Tiempo atrás, Ubisoft le quitó la U a ZombiU y lo revendió en otras plataformas, un juego que, aunque no del todo sobresaliente, tenía su razón de ser gracias al GamePad, no a un control tradicional. Pero el caso actual es de Nintendo intentando relanzar sus “éxitos de Wii U” en la reluciente consola moderna dual, que en ventas ya está dejando rezagada a la anterior con tan solo menos de un año en la industria.

Pokkén Tournament fue otro de los que no tardó en sumarse al catálogo ‘DeluXe’ de Switch, como una forma por parte de The Pokémon Company de calmar a sus huestes de fanáticos que piden un RPG de la línea tradicional, uno que llegará en el futuro cercano pero que apenas aprende a caminar. LEGO City Undercover, de los mejores exclusivos de Wii U no desarrollado por Nintendo, también terminó haciendo su transición a Switch, mientras que Bayonetta 2 prepara unas sexis maletas umbranias junto con el primer título para aterrizar en Switch, hasta que el tercer juego sea finalizado e igualmente publicado por la Gran N.

Poco a poco Wii U se sigue quedando sin exclusivos que por lo menos eran su único motivo de orgullo, siendo Hyrule Warriors y Donkey Kong Country: Tropical Freeze los últimos en sumarse a la fiebre de Switch. Pero esto no es una mala noticia ni lo afirmamos como sollozo quejumbroso, todo lo contrario, como decíamos al comienzo, fueron muchos los que no probaron los juegos previamente mencionados porque eso les implicaba invertir en un Wii U. Los números totales nos dan la razón que simplemente el sistema no supo venderse a si mismo, así que no podemos culpar a Nintendo de querer aprovechar las vacas gordas del presente que fueron tan flacas en el ayer.

Decir que Wii U se quedó sin sus exclusivos sigue siendo algo un tanto exagerado, por lo menos si no recordamos que aún permanecen varios juegos en una lista que, de seguir la tendencia, serían las futuras adiciones de Switch -con algunas excepciones de hardware dado el uso obligatorio de GamePad en ciertos casos-, tales como Pikmin 3, Game & Wario, Super Mario Maker, Super Smash Bros Wii U, New Super Mario Bros U, New Super Luigi U, Super Mario 3D World, Paper Mario: Color Splash, Captain Toad y Tokyo Mirage Sessions #FE.

Haga clic para comentar

Deja tu comentario

Además no te pierdas