Dead Rising 3 – La reseña

Nuestro colaborador Miguel Ramos nos trae sus impresiones y recomendaciones sobre el título de Capcom Vancouver, Dead Rising 3, para la Xbox One.

¿Qué sucede si juntamos una epidemia zombi, una gran ciudad en caos como Los Perdidos, un prodigioso joven mecánico y la posibilidad (y necesidad) de utilizar casi cualquier objeto que encontremos para defendernos? Este explosivo coctel de factores nos da como resultado Dead Rising 3  un juego que, para mi sorpresa, me ha logrado atrapar.

Diez años después de los eventos ocurridos en la trama de Dead Rising 2 en Fortune City, llega esta nueva entrega de la franquicia en la que la ciudad de Los Perdidos, California, (una ciudad ficticia basada en Los Ángeles) ha tenido un brote de una infección zombi que en 72 horas ha logrado convertir la ciudad en un verdadero apocalipsis y obligado al ejército a aislar la ciudad por completo, lo que deja a los posibles sobrevivientes muy pocas probabilidades de vivir para contarlo. Sin embargo, entramos en el papel de Nick Ramos un mecánico sobreviviente a la epidemia que maltrecho busca la manera de escapar de la ciudad junto a un pequeño grupo de sobrevivientes que se encuentra en el camino; Nick es un hombre tenaz que no se rendirá fácilmente ante las múltiples adversidades que presenta este survival horror a pesar de que nada está a su favor y nosotros nos divertiremos siguiendo su historia que, aunque suele caer en muchos clichés clásicos dentro del género de los zombis, aprovecha el caos que presenta para mostrar situaciones de todo tipo, desde atemorizantes hasta ridículamente graciosas.

Al iniciar nuestra partida podremos decidir cuál será el modo de juego en el que entraremos en esta ciudad desesperanzadora, ya que tenemos el tiempo contado para poder escapar antes de que la zona sea bombardeada para erradicar por completo toda la vida orgánica que allí se encuentra. El Modo Complecionista es perfecto para quienes buscamos explorar, encontrar todos los objetos coleccionables del mapa hasta dominar el 100% del juego y desbloquear todos los logros que el título ofrece; por otra parte, está el Modo Carrera Veloz para quienes quieren completar las misiones de la historia principal, ya que en un apocalipsis zombi no querrán ir contando cuantos pasos han dado sino escapar lo más rápido posible. El Modo Casual es para quienes solo buscan divertirse sin preocupaciones y desviándose sin problemas de las misiones principales, también está disponible el polo opuesto al Modo Casual, llamado Modo Experto, para los jugadores más hábiles en este estilo de juegos; finalmente, tenemos el modo más interesante, Pesadilla, y créanme es una pesadilla para cualquier tipo de jugador, ya que el tiempo para escapar es mucho menor y solo podrás guardar en zonas seguras o los baños portátiles que serán nuestros puntos de guardado, esto se suma al hecho de que nuestros enemigos son más resistentes y tienen muchas ansias de acabar con nosotros, así que las habilidades de quien se enfrente a este reto serán verdaderamente puestas a prueba.

Desde su presentación durante la E3 de 2013, Capcom Vancouver nos advirtió que este sería el Dead Rising más oscuro hasta la fecha, promesa que el juego cumple totalmente a pesar de que el estandarte de esta franquicia siempre han sido la diversión y los momentos cómicos que logra inclusive en un panorama tan hostil; los entornos dentro de los que nos moveremos crean un buen ambiente sombrío que nos atrapa fácilmente en esta pesadilla y eso es estupendo porque logra mantenernos esperando lo peor, pero ¿qué mejor manera de esperar lo peor que vestido con la camiseta del equipo de fútbol americano favorito de Nick, como como luchador de lucha libre o, incluso, para mayor comodidad en pijama? Es ahí cuando la personalización entra en juego y la disfrutaremos tanto que buscaremos cada prenda que Nick pueda utilizar en la ciudad; encontraremos desde un traje de bombero hasta una falda de secretaria ¿ridículo? ¡Sí! Pero qué importa ¡es el fin del mundo! Es curioso pasar por un momento de pánico y violencia haciéndonos camino a través de los zombis vestido de mariachi pero, gracias a la alta calidad gráfica del juego, en especial en las expresiones de nuestro personaje, con un doblaje al español perfecto que no son conversaciones planas, sino que en verdad  transmiten la frustración y preocupación que Nick y los demás sobrevivientes pueden llegar a sentir durante su intento de escape, se crean matices entre lo gracioso de la vestimenta y la difícil situación que los protagonistas pasarán

Los Perdidos no es una ciudad de grandes proporciones en cuanto a superficie se refiere, pero se siente enorme al tener que pasar por encima de barricadas, autos volcados y calles destruidas y cerradas por el ejército; sin embargo, lo que más nos hará sentir que jamás podremos escapar de este infierno son las inmensas hordas de zombis que están en toda la ciudad, cada uno de ellos intentará atacarnos y darse un festín con nuestra carne. A veces sentirán que no hay escapatoria porque incluso subirse al techo de un auto resulta inútil ya que los zombis moverán el pedazo de chatarra sobre el que estamos hasta hacernos caer en sus horripilantes y putrefactas manos, esto le da un toque de adrenalina al juego ya que para sobrevivir no podemos estar quietos, siempre hay que estar en movimiento porque habrá calles en las que serán más de quinientos zombis los que nos esperen ansiosamente o también encontraremos a algunos atacando a los pocos sobrevivientes que aún quedan en la ciudad, a quienes podremos salvar y así lograr que algunos de ellos se unan a nuestro equipo para no continuar esta difícil tarea solos (o simplemente pueden continuar siendo la parte viva del caos que en Los Perdidos se vive y se sufre). Dead Rising 3 no será un juego lineal en el cual siempre debemos ir del punto A al punto B acabando con todo lo que se nos atraviese en el camino, al contrario, nos da una libertad de movimiento y de acciones desde el modo en que nos transportamos a los distintos destinos hasta la manera en que nos defenderemos de las varias amenazas que nos acechan.

¿Qué mejor manera de esperar lo peor que vestido con la camiseta del equipo de fútbol americano favorito de Nick, como como luchador de lucha libre o, incluso, para mayor comodidad en pijama?

Las armas y los vehículos son  las características más llamativas de Dead Rising 3 ya que en ocasiones nuestro arsenal puede estar conformado por objetos que jamás creerían que nos salvaría en las situaciones que pasaremos ¿Un cono de tráfico? ¿Un cuchillo de chef? ¿Una tabla de surf? ¿Una bolsa de basura? ¿Un oso de peluche? Tal vez exageraron con la bolsa de basura, pero ¡combinar estos objetos es lo que aumenta la diversión! La habilidad de Nick como prodigioso mecánico nos permite crear armas combinadas en cualquier momento con los objetos que encontramos, esto gracias a planos que nos dirán qué objetos utilizar, cuál será el desquiciado resultado que obtendremos y cuáles serán las muchísimas las combinaciones que podremos lograr; claro está que debemos tener en cuenta que nuestras armas no durarán por siempre ya que se dañarán con cada golpe que demos. En cuanto a los vehículos, podremos escapar de las hordas de zombis en autos de enseñanza, motos chopper, autos deportivos y… ¿Una aplanadora? ¡Sí, una aplanadora! Y por qué parar ahí cuando los vehículos también los podemos combinar, así fue como logré encontrar mi vehículo favorito en el cual una moto chopper y una aplanadora se juntan para crear El Devorador.

La inclusión de Kinect en Dead Rising 3 es uno de los puntos a favor del juego ya que no es invasivo y sí genera sensaciones que crean más inmersión en este infierno, por ejemplo, si un zombi nos ataca y tenemos Kinect activo podremos sacudir el mando para soltarnos de sus horripilantes manos, también el uso de comandos de voz nos facilita algunos detalles como cambiar de arma con la frase “cambio de arma” o llamar la atención de nuestros enemigos vivos con frases que los enfurecerán según la personalidad de cada uno (el juego nos ayuda en este aspecto y nos notificará cuál frase enloquece a cada personaje); todo esto logra que el uso del mando esté enfocado en nuestros movimientos y ataques creando una comunión perfecta entre mando y Kinect.

El punto más bajo que tiene Dead Rising 3 es su multijugador, ya que consiste en un modo cooperativo en el cual otros jugadores que quieran jugar el mismo modo de juego en el que nos encontramos entrarán a nuestra partida sin importar qué tan avanzado sea el estado de la misma; además, no llena completamente el termino cooperativo, pues los jugadores están presentes en la misma partida pero cada uno puede realizar actividades distintas, lo que para algunos puede ser un punto a favor ya que tienen la libertad de compartir distintas aventuras con amigos, pero al no tener un objetivo claro para ambos jugadores el modo cooperativo pierde el norte y es muy común que las partidas cooperativas no duren más de veinte minutos.