Conecta con nosotros

Cine y TV

Star Wars: El Ascenso de Skywalker – Reseña

La saga de Skywalker llega a su final. ¿Será esta película la conclusión que merece?

Publicado

el

Pocos días antes de ver El Ascenso de Skywalker escribí un artículo explicando por qué había perdido la fe en que me gustara esta película. No sentirme emocionado por un nuevo filme de Star Wars fue algo nuevo para mí. Una vez sentado en la oscuridad de la sala de cine, las primeras notas de la icónica melodía compuesta por John Williams no me pusieron la piel de gallina como en el pasado, sino que me llenaron de nervios. ¿Sería esta la película que acabaría con mi amor por la saga?

Me complace anunciar que no fue así. Dos horas y treinta minutos después, abandoné el teatro amando Star Wars tanto como siempre.

El Ascenso de Skywalker no es una buena película, pero nos ofrece algunas razones para amarla y disfrutarla, así sea solo un poquito.

La historia comienza un tiempo después del final de Los Últimos Jedi. Kylo Ren se ha convertido en el Líder Supremo de la Primera Orden y la diezmada Resistencia se oculta, haciendo lo que puede para enfrentar a sus enemigos. Cuando una transmisión revela a toda la Galaxia que el antiguo Emperador Palpatine se encuentra con vida, ambas fuerzas buscan encontrarlo y descubrir qué trae entre manos.

El desarrollo de El Ascenso de Skywalker se basa en la búsqueda de un objeto a través de varios planetas, con la Primera Orden en constante acecho de los protagonistas. El objeto en cuestión, una guía para encontrar ‘el planeta de los Sith’ en el que se oculta Palpatine, no es más que una mala excusa para mantener el desarrollo avanzando de la manera más veloz posible. A duras penas nos da tiempo para descansar entre escenas de acción, diálogos de exposición y persecuciones.

Esto es una lástima, ya que las subtramas que se asoman tienen mucho potencial. Durante estos viajes conocemos un planeta asediado constantemente por la Primera Orden, un grupo de Stormtroopers que huyeron tras negarse a asesinar civiles y un festival lleno de color. Cualquiera de estos planteamientos se hubiera prestado para una gran historia, pero terminan siendo simples trasfondos que no son explorados para nada. Probablemente, los veremos referenciados de nuevo en cómics y novelas.

El lado bueno de este ritmo acelerado es que nos presenta muy buenos momentos de acción. Hay varios enfrentamientos entre Rey y Kylo Ren que resultan emocionantes y usan de formas muy originales la conexión de la Fuerza que existe entre ambos. También asistimos a buenos tiroteos y situaciones muy tensas para los protagonistas. Funciona bien, ya que apenas nos da tiempo para fijarnos en los huecos de la trama.

Durante la mayor parte del metraje seguimos al grupo conformado por Rey, Finn, Poe, Chewbacca, C3-PO y BB8. Ellos tienen una excelente química y da mucho gusto verlos trabajando juntos. Esta es la principal razón por la que no odié este filme. Sus personajes son muy carismáticos y me fascina verlos en acción. Lo mismo puedo decir de Kylo Ren. Su destino va a resultar algo controversial, pero el arco argumental que lo lleva allí está muy bien trabajado.

Sin embargo, casi todas estas fortalezas se deben a lo que conocemos de estos personajes gracias a los dos filmes anteriores. La mayoría de diálogos en El Ascenso de Skywalker son vergonzosamente simples. Hay muchas bromas que no funcionan, líneas que no representan la personalidad de quien las dice y una exagerada cantidad de explicaciones innecesarias.

Hablando de elementos innecesarios, todo lo relacionado con Palpatine en esta película es pésimo. Su presencia, historia y la forma en que afecta el trasfondo de Rey son perjudiciales. Las revelaciones que hace son tan absurdas y forzadas que causaron risas en la función a la que asistí. La ‘gimnasia mental’ que hace este guión para deshacer el trabajo que hizo Rian Johnson con la historia de Rey en Los Últimos Jedi es realmente frustrante. El único efecto que tiene es que, tal como dice la reseña de Los Angeles Times, nos hace recordar lo buena que fue la película anterior.

También causa vergüenza el tratamiento que reciben personajes como Rose Tico y el General Hux. La primera fue uno de los centros emocionales de Los Últimos Jedi y quien nos dio algunas de las lecciones más importantes de la saga, pero aquí se ignora todo eso. El importante desarrollo que tuvieron personajes como Poe y Finn en esa película es ignorado y vuelven a ser los mismos del Episodio VII. Como dije antes, sigo queriendo a estos personajes. Sin embargo, perdieron profundidad. Leia es uno de los que más sufre por esto, especialmente porque su papel quedó limitado por los trágicos eventos del mundo real. Ni hablemos de la esperada aparición de los Caballeros de Ren. A pesar de su interesante diseño, son absolutamente irrelevantes.

La presencia de Palpatine es un reflejo de lo poco arriesgado que es este filme. Así como El Despertar de la Fuerza imitó la estructura de Una Nueva Esperanza, este tiene demasiados elementos sacados directamente de El Retorno del Jedi. Es dolorosamente poco original. La reverencia innecesaria que hace a las películas anteriores puede causar breves momentos de emoción, pero esta se desvanece cuando nos damos cuenta de su falta de lógica.

Entonces, tomando en cuenta todos estos aspectos negativos, ¿por qué no odié El Ascenso de Skywalker? Para comenzar, ya dije que me gustaron sus escenas de acción y lo mucho que adoro sus personajes. Pero la principal razón está en pequeños detalles y momentos específicos del filme. Por ejemplo, la escena final con Kylo Ren en la luna de Endor puede ser uno de los momentos más hermosos de la saga.

Me resulta difícil dar una puntuación a esta película. No está a la altura de las dos anteriores, pero no resulta tan terrible como algunas de las precuelas. Los elementos relacionados con Palpatine son lo peor que le ha pasado a Star Wars desde que explicaron qué son las Midiclorias, pero tiene buenos personajes y el cierre de sus arcos argumentales es satisfactorio. Que les guste o no El Ascenso de Skywalker depende de la clase de fanáticos que sean y lo que signifique Star Wars para ustedes.

Eso sí, independientemente de que disfrutemos o no este filme, la ‘Saga de Skywalker’ merecía un mejor final. Tal vez hubiera sido mejor haber tenido de nuevo a Rian Johnson en la silla de director en lugar de J.J. Abrams.

Star Wars: El Ascenso de Skywalker
3/5 Nota
Haga clic para comentar

Deja tu comentario

Además no te pierdas