Monster Hunter 4 Ultimate – La reseña

Si me piden resumir Monster Hunter en pocas palabras, diría que se trata de un mash-up de constantes peleas con jefes finales encarnados en enormes bestias. Es un concepto que puede sonar denso y agotador, pero esta serie creada por Capcom logra sumergirnos en un mundo donde las batallas contra monstruos gigantescos es pan de cada día, con un sistema de combate profundo que, no voy a mentirles, es intimidante durante las primeras horas de juego. Sin embargo, la más reciente entrega de la franquicia, Monster Hunter 4 Ultimate, le da la bienvenida a los nuevos jugadores con un flujo amigable para aprender cómo ser un experto cazador. Aún así, y al igual que en anteriores títulos, nos encontraremos con algunos baches en el camino y otros aspectos que pudieron tener un mejor acabado.

Al comenzar el juego somos lanzamos directamente a la acción. Mientras somos pasajeros en un barco que navega las arenas del desierto, un gigantesco pez nos atacará; la misión es apoyar al capitán del navío para deshacerse de este monstruo y poder llegar a una villa viajera en paz, para eso usaremos balas de cañón e incluso treparemos sobre el lomo de la criatura. Esta batalla de épicas proporciones –aunque, claro está, con una dificultad muy baja– es una probada de lo que encontraremos a lo largo de este juego.

Una vez en tierra firme comienza la acción real de Monster Hunter 4 Ultimate, cuando por primera vez salgamos a campo abierto por nuestra propia cuenta. A partir de este momento los recién llegados a la franquicia se sentirán amedrentados, pues estarán ante a un gran mundo pero no sabrán cómo enfrentarlo, sabemos que hay varias armas a nuestro alcance, pero no mucha información sobre cómo usarlas. Monster Hunter es como la vida misma, así que aprender a explorar y combatir cómodamente es cuestión de prueba y error. Pero no todo es tan amenazante, ya que en este título tendremos un avance más lento en los sucesos del juego para así poder comprender la infinidad de elementos que encontramos; es algo que puede frustrar a los jugadores experimentados, acostumbrados a la falta de explicaciones, pero es una adición importante para esta serie: tener un sistema más amable con los recién llegados.

Existen un total de 14 tipos de armas que podremos usar en Monster Hunter 4 Ultimate, dos de las cuales son nuevas en la serie. La primera es el Insect Glaive, que además de poder ofensivo, tiene la habilidad de extraer partes de los monstruos para subir los stats de nuestro cazador durante las batallas. Por otro lado tenemos la Charge Blade, una combinación espada y escudo que podremos transformar en una gran hacha con efectos secundarios. Son dos armas bastantes interesantes que de seguro verán en muchos otros jugadores por sus geniales efectos, alcance y poder para acabar con los monstruos.

Cuando conozcan todas las armas y consigan algunas con las que se sientan cómodos, Monster Hunter 4 Ultimate se transforma en un ciclo que los mantendrá entretenidos por muchas horas. Primero deberán explorar alguno de los escenarios y buscar monstruos; cuando encuentren uno de los grandes, el objetivo será cazarlo y obtener partes de su cuerpo que servirán como material para confeccionar mejores armaduras, de esta forma nos haremos más fuertes y podremos enfrentar criaturas más poderosas, repitiendo el proceso hasta que seamos expertos cazadores.

Pero ser un guerrero hábil que no tiene temor hacia los monstruos no será una tarea sencilla ni rápida. Por un lado tenemos lo complejo del sistema de batalla, donde cada parte de la armadura, al igual que las armas, cuentan con stats y número que al principio parecerán aleatorios y extraños, pero que con el tiempo aprenderemos a usar a nuestro favor. Sumado a esto, las criaturas que enfrentemos tendrán comportamientos especiales y variados, no solo para atacarnos sino para demostrar qué tanta vida queda en sus cuerpos, cambiando pequeñas actitudes para indicar su condición. Podremos sentirnos como cazadores experimentados una vez seamos capaces de leer todos estos movimientos de los monstruos, esquivando sus ataques, detectando su vitalidad o posición en el mapa, algo que tomará un tiempo considerable con tan solo uno de los monstruos y la tarea debe ser repetida con las demás grandes bestias, que en total suman 75 criaturas para cazar.

Las cacerías han cambiado a lo largo del tiempo y esta vez el cambio es bastante notorio. Antes el eje de movimiento de los cazadores era solamente horizontal, moviéndose sobre terrenos relativamente planos (o bajo el agua en Monster Hunter 3 Ultimate), pero Monster Hunter 4 Ultimate introduce las tres dimensiones, y no me refiero al efecto 3D de la consola. Los personajes ahora podrán saltar desde distintas alturas en el escenario o escalar paredes para atacar a los enemigos desde el aire, logrando montar sus lomos y atacarlos por la espalda. Lograr esto es un poco complicado, pues requiere precisión a la hora de escalar y saltar, pero cuando sale bien es realmente satisfactorio, en especial cuando completamos el minijuego que se activa al montar un monstruo, en el que debemos acuchillarlo a la vez que nos sostenemos para no caer. El nombre Monster Hunter: Rodeo era perfecto para este juego, pero los creativos de Capcom no siempre pueden ser tan brillantes.

En Monster Hunter 4 Ultimate existen otro tipo de misiones que no son tan divertidas, pero sí necesarias. Gran parte del arsenal debemos construirlo nosotros mismos, así que es una obligación recoger la materia prima requerida, que no siempre son partes de monstruos sino también objetos como hierbas, rocas, insectos y frutas. Muchas de las tareas que el juego nos da están enfocadas en recoger todos estos materiales y, aunque en definitiva no ofrece la misma emoción que destrozar a una bestia, funcionan para conseguir todo tipo de items y de paso familiarizarnos con los terrenos.

Esta vez tenemos una forma de evadir las misiones si queremos, todo gracias a una nueva adición en este título, las Expediciones, un recorrido por un mapa ligeramente laberíntico, con pasillos reducidos en lugar de áreas abiertas, en el que tenemos que llegar del punto A al punto B recogiendo lo que encontremos y tomando muestra o derrotando a las bestias que aparezcan. Es un modo mucho más relajado que las cazas convencionales y es perfecto para que los principiantes conozcan varias de las mecánicas de juego. Lamentablemente la opción de ir en Expediciones no está disponible desde el principio, pues hay que jugar por unas horas y avanzar en los eventos del juego para que aparezca. De lo contrario habría sido una perfecta forma de introducir el mundo de Monster Hunter.

El éxito de Monster Hunter no se debe solamente a lo bien diseñado de sus criaturas y sistema de combates, sino también al fuerte contenido multiplayer que ofrece. Anteriormente podíamos unirnos a nuestros amigos en cacerías conjuntas que elevaban el reto a pesar de estar ante un monstruos que ya habíamos derrotado, obligando a usar hábilmente las características de cada guerrero para salir victoriosos. Ahora, y por primera vez en una título portátil de esta franquicia, Monster Hunter 4 Ultimate nos ofrece la opción para jugar a través de la red en partidas de hasta cuatro jugadores que deberán completar todo tipo de misiones. Es un apartado que le aporta muchísimo al juego, no solo porque las misiones multiplayer existen separadas a las que conseguimos en solitario, o porque jugar con otras personas haga de la lucha contra monstruos algo aún más divertido, sino también porque encontrar con quién jugar es fácil y directo. Podemos entrar rápidamente en partidas con los amigos que tengamos registrados en la Nintendo 3DS y que también jueguen MH4U, ya sea a través de conexión local o usando Internet, pero lo más sobresaliente es poder encontrar sin mayor esfuerzo a jugadores desconocidos que quieran jugar con nosotros. Para eso contamos con un simple menú de búsqueda con filtros para escoger el nivel y tipo de misión, lo que nos ayuda a evitar combates fuera del alcance de nuestras habilidades.