Pro Evolution Soccer 2016 – La reseña

Konami ha recuperado el rumbo y de una muy buena manera. Para quienes crecimos jugando International Superstar Soccer (o Winning Eleven) fue muy triste ver que durante los primeros años de esta década los títulos herederos de esa magnífica franquicia eran un fracaso de proporciones colosales, todo indicaba que Electronic Arts se había hecho no sólo casi todas las licencias habidas y por haber, sino que también se estaba quedando con los fanáticos del fútbol virtual.

Situémonos en el año 2012, la nueva generación de consolas estaba por llegar y Konami lo sabía; las dos o tres entregas anteriores de Pro Evolution Soccer habían sido las peor calificadas de la historia de la franquicia y necesitaban un cambio, por lo que decidieron traer un arma secreta y es aquí donde aparece la sombra de Hideo Kojima, pues fue de parte de la compañía del genio de Metal Gear Solid que el equipo de Kei Masuda recibió el FOX Engine, un arma poderosa con la que esperaban cortar la brecha con respecto a FIFA de EA. Así pues, PES 2014 fue el primer título en usar esta nueva tecnología, aunque casi todo fue un desastre y una clara decepción para los fanáticos más fieles. Sin embargo, esto hacía parte de un fuerte cambio que vería sus primeros resultados con PES 2015, un juego que si bien no fue perfecto, gustó mucho entre los aficionados e hizo recuperar la esperanza de ver de nuevo a PES en lo más alto de la gloria del fútbol virtual. La vara quedó muy alta y Yoshikatsu Ogihara (máxima autoridad en PES 2016) lo sabía muy bien.

Así llegamos a Pro Evolution 2016, un juego que no sólo se enfrenta al los desafíos tecnológicos que son usuales en una carrera de apenas dos caballos por ver cuál de ellos gana el Gran Premio al mejor videojuego de fútbol del mundo, sino que además se ve frente al desafío histórico de recuperar un nombre y una reputación. Con la bandera del aniversario número 20 de la franquicia, el título para la temporada 2015/2016 fue desarrollado en el corazón de PES Productions con el objetivo de ratificar el buen momento que se tuvo con PES 2015 y de tomar varias ventajas sobre FIFA 16, claro en aspectos tecnológicos y de jugabilidad, pues no es viable esperar que se logre superar en ventas a Electronic Arts y su impresionante maquinaria de mercadeo. No todavía.

Entremos en materia. Al prender la PlayStation 4 y entrar al menú principal vemos algo que no dista mucho de lo que podríamos encontrar en FIFA. Lo primero que hacemos es entrar a un partido amistoso y buscar los equipos para jugar; es aquí donde se puede ver lo peor de PES 2016 en su máximo esplendor: la notoria ausencia de licencias. Mientras que EA se ha hecho con muchísimas ligas, equipos y jugadores, PES no cuenta con la misma ventaja y en cierta medida es desmotivante ver que, por ejemplo, el clásico de Manchester debe ser jugado entre el United y un equipo ficticio conocido como «Man Blue», y cuando uno va a elegir el estadio no hay mucho qué elegir pues apenas tiene 12 estadios reales (5 de ellos en Brasil, algo bueno para los fanáticos del Brasileirao). Además, algunos equipos apenas cuentan con los nombres reales de los jugadores, en otros los jugadores no se parecen y hay varios clubes que ni siquiera tienen los nombres de la alineación oficial. Igual, esto del aspecto físico de los jugadores es algo que tampoco FIFA cumple a cabalidad con sus numerosas licencias de exclusividad. Totalmente comprensible para ambas partes.

Así que es bueno irse a lo clásico y elegir dos selecciones licenciadas (por ejemplo Francia vs. Brasil) y con esto iniciar un partido. Al empezar con los himnos nacionales algo malo pasa con la animación donde vemos a los jugadores cantando, pues parecen peces moviendo sus bocas ante la ausencia de agua; el movimiento de los ojos no se ve humano sino robótico, parecen muñequitos de ventrílocuo. Sin embargo, les aseguro que de aquí en adelante me es difícil hablar realmente mal de este juego. Lo que se viene me hace sonreír y eso contando que, tradicionalmente, he sido un gamer mucho más cercano a FIFA que a PES.

Empecemos por los resultados del FOX Engine y los sistemas derivados. Descontando el momento del himno y los ojos, las animaciones previas al kick-off son muy bien logradas y si uno selecciona equipos licenciados PES 2016 hará alarde de los impresionantes detalles de la ropa y los balones, que de hecho parecen reales si uno parpadea rápidamente. Los jugadores licenciados tienen un innegable parecido con sus pares de la vida real. El sistema de colisiones parece ser uno de los más notorios avances del juego en comparación con las versiones anteriores, pues da la sensación de que la manera como se golpean los jugadores es más realista y precisa. Aún así, hay choques que no me convencen (en especial cuando son a baja velocidad).

No cabe duda de que el FOX Engine es uno de los mejores motores gráficos de la actualidad y es notorio que Konami lo está aprovechando de una mejor manera en PES 2016, el juego ofrece cambio de clima dinámico a medida que avanza el partido. De hecho, bajo la lluvia los jugadores se sienten algo lentos y su reacción no es tan eficiente como cuando la cancha está seca; si el césped está muy largo el balón se comporta distinto y si hay un charco el esférico se frena. Lamentablemente a veces el césped no se siente realista, así que espero que en PES 2017 trabajen para mejorar este aspecto. De hecho, al FOX Engine se le puede exprimir más, sin duda en PES Productions tienen aún mucho por ganar gracias a los avances de sus pares en Kojima Productions, pero lo que se presenta en PES 2016 está bastante bien.

Al iniciar el partido los movimientos de los jugadores se sienten muy bien logrados y el control sobre los jugadores se siente más fluido y libre que antes, cosa que si uno es hábil en el cuerpo a cuerpo, PES 2016 ofrece lo mejor posible en este sentido. Sé que no soy el mejor detrás del control, y puede que no logre detectar ciertos fallos, pero no he logrado sacar una de esas jugadas «de PlayStation» tan famosas entre los videojuegos de fútbol, y esto es bueno pues habla bien de los avances de realismo que presenta PES 2016. Aún así considero que es más fácil hacer un gol en PES que en FIFA, y bueno, eso no me molesta mucho.

A diferencia de PES 2012 (un juego en el que apenas pude soportar unos cuantos partidos y quedó vetado para siempre en mi vida), el nuevo PES 2016 es un título que, aunque juguemos horas, ofrece mucho entretenimiento y más si se juega contra otra persona, sea en línea o en la misma consola. Este título está diseñado para que uno gaste muchas horas de vida junto a los amigos y sin que uno se arrepienta por ello, pues tiene el componente clave de un buen videojuego sin importar género, nivel gráfico o complejidad: PES 2016 es adictivo. ¿Y qué sobre si es un simulador o un arcade? ¡Qué importa! Para mí no es ni lo uno ni lo otro, es un justo término medio entre las dos cosas. No puedo asegurar que sea un simulador de fútbol totalmente fiel, pues nunca en mi vida he jugado un partido de fútbol real de 90 minutos y mucho menos lo he hecho en un videojuego, pero con las pistas que tengo podría atreverme a decir que, configurando los ajustes, podría ser una buena aproximación a la realidad. Igual, ¿alguien va a jugar 90 minutos en PES? Lo mejor es ajustar un partido a 10 minutos, velocidad rápida y tratar de hacer la mayor cantidad de jugadas posibles.

Konami estuvo perfeccionando el trabajo hecho con PES 2015 y para esta temporada entregó un juego que le saca el jugo a las jugadas aéreas, pues ahora es posible derribar a los oponentes usando uno de los analógicos. También permite usar algo conocido como «Jugador Inteligente», una funcionalidad que de acuerdo a la táctica puede involucrar directamente 2 o 3 futbolistas en las jugadas. Por cierto, ya se pueden controlar las celebraciones y ciertos jugadores tienen sus propias celebraciones. ¿Vieron la selfie que se toma Francesco Totti?

En cuanto a la ambientación sonora el juego pasa con buena nota. En el menú, la música resulta adecuada y agradable y de hecho al ingresar en los modos de juego de las competiciones UEFA o Conmebol se cuenta con toda una banda sonora oficial de dichas copas. Ya entrados en el campo de juego el sonido ambiente está muy bien logrado, aunque tiene menos personalización de lo que se espera (por ejemplo, sería bueno tener más cánticos propios de cada equipo); si uno cierra los ojos siente que está en un estadio de verdad y esto apoyado con las animaciones de la hinchada le da más fuerza a dicha sensación. ¿Bengalas, papeletas y celebraciones peligrosas? ¡Claro! PES 2016 está tan bien hecho en este sentido que sólo hacen falta las típicas peleas en las tribunas de Suramérica. Los comentarios en español argentino y chileno se sienten bien, aunque algunos desperfectos en la grabación del tono de voz a la hora de combinar frases con los nombres de los jugadores o los equipos les quita el realismo que se buscaba obtener. En cambio, en inglés, aunque permanecen estos defectos, los comentarios se sienten más fluidos y por momentos parece que fuera una conversación natural entre los periodistas. Todavía hay bastante por mejorar en este sentido.

Si el usuario cuenta con el suficiente tiempo (y paciencia) podría entrar al modo Editar para arreglar el problema de licencias lo más que se pueda. En esta opción se pueden cambiar los nombres de los estadios, modificar la lista de convocados a las selecciones nacionales y, por supuesto, se pueden cambiar los uniformes junto con los nombres de los equipos, además de la apariencia de los jugadores y sus apellidos. El juego ofrece miles de combinaciones distintas para el aspecto de los jugadores o el diseño de los uniformes, por lo que teóricamente se puede crear casi cualquier cara. Además, usar esta funcionalidad puede resultar un buen pasatiempo.

Para PES 2016 la Liga Master toma el protagonismo que merece, pues sin duda es uno de los más tradicionales modos de juego offline desde su aparición en International Superstar Soccer 98. Para esta ocasión esta modalidad trae un menú de navegabilidad sencilla que nos permite asumir todos los roles del Director Técnico, desde contratar un jugador hasta preparar la estrategia para el siguiente partido y realizar entrenamientos. Al iniciar una nueva partida en Liga Master, el juego nos pide crear el aspecto del entrenador y una vez hayamos firmado con el equipo que elegimos nos muestran los desafíos de la temporada. Algo que me pareció muy valioso de la Liga Master es que permite experimentar la ruleta de los sorteos en torneos como la Copa Libertadores o la Champions League y que también permite ver noticias del mercado de fichajes, aunque casi me da un infarto al ver que «Sergio Ramos ha sido fichado por F.C. Barcelona» y cosas imposibles por el estilo.

Mientras que FIFA cuenta con FUT, Konami ofrece algo similar con MyClub, este modo de juego es una plataforma en línea en la que el usuario puede armar su equipo de ensueño. Se parece mucho a la Liga Master en cuanto a que podemos comenzar con un equipo de muy bajo nivel y la idea es ir ganando puntos para mejorar la plantilla. Entre amistosos y liguillas de 10 partidos para subir de nivel, el jugador puede competir sólo contra la computadora o hasta contra otras 21 personas en línea. Y no sólo se puede escoger a los jugadores, también se puede cambiar de cuerpo técnico (asistentes, DT, entre otros), ojeadores y representantes. Es una experiencia de juego interesante, pero tal vez no sea lo más llamativo para los jugadores tradicionales.

Sí, ya dije que las licencias de PES 2016 son lo más malo del juego, pero para PES 2016 Konami dio un golpe muy duro. La firma japonesa se hizo con los derechos de los torneos UEFA por tres años (UEFA Champions League, UEFA Europa League y UEFA Super Cup), sumando la continuidad de los torneos continentales de clubes de Conmebol (Copa Libertadores, Copa Sudamericana y Recopa Sudamericana) y la AFC Champions League. Cabe destacar que PES 2016 ofrece de nuevo la Liga Chilena a pesar de no estar licenciada (con Copa y Supercopa incluidas), y que en años futuros seguirán avanzando en el tema de las licencias, pues Konami adquirió los derechos de la Euro 2016. ¿Entonces EA no podrá volver a sacar videojuegos para la Euro?

Reseña hecha con una copia digital brindada por el equipo de Konami en su versión de PS4