Anthem y los críticos de videojuegos que «no saben jugar videojuegos»

A mediados de 2017, el periodista de videojuegos Dean Takahashi se encontraba en Alemania cubriendo Gamescom. Durante el evento se encontró con una demo de Cuphead, el excelente —y endemoniadamente difícil— juego de acción y plataformas de Studio MDHR. A pesar de no ser jugador de títulos de este tipo, decidió probarlo. No le fue nada bien. Sin embargo, el resultado de su fracaso le pareció tan hilarante que decidió publicar esos agónicos 26 minutos de juego en el canal de YouTube de VentureBeat.

Lo que pasó a continuación no te sorprenderá.

Insultos, burlas y amenazas. Una gran cantidad de jugadores se tomaron el video como una ofensa. “¿Cómo es posible que alguien tan malo para jugar sea un periodista de videojuegos?”, preguntaron mientras creaban artículos, subían videos y publicaban en redes sociales sobre cómo la crítica de videojuegos no está formada por “verdaderos gamers”. Pidieron a gritos que Takahashi fuera despedido y no volviera a ser contratado como crítico de videojuegos.

No les importó que Dean Takahashi no fuera en realidad un crítico de videojuegos —su especialidad son reportajes y noticias— ni que fuera el periodista que destapó el fiasco del ‘aro rojo de la muerte’ que afectó millones de Xbox 360. Si no puede jugar bien un videojuego, no es una persona digna de estar en la prensa.

Situaciones como esta son tristemente comunes, pero llegan a volverse realmente desagradables cuando los acusadores son miembros de la misma industria.

Mike Ybarra, presidente corporativo de Xbox, publicó el siguiente tweet el pasado 20 de febrero en referencia a las quejas de varios críticos, específicamente Sam Machkovech de Ars Technica, sobre una sección especialmente frustrante de Anthem, el nuevo juego de BioWare.

This was actually very easy to do. Amazed at the whining. One reviewer, not the below, reviewed the game yet in the review cited that he didn’t even know how to do a combo. Embarrassing to review with such a lack of knowledge. https://t.co/OcwbApb4Nb

— Mike Ybarra (@XboxQwik) February 20, 2019

“Esto era realmente fácil de hacer. Estoy impresionado por los lloriqueos. Un crítico, no el aquí mencionado, reseñó el juego y mencionó que ni siquiera sabía cómo hacer combos. Qué vergüenza criticar con tal falta de conocimiento”.

Esto hace referencia a los ‘retos de los legionarios’, tareas que hay que cumplir en cierta sección del juego y que pueden retrasar bastante el progreso en la historia, sobre todo si el jugador no domina técnicas como los combos. No son pocos los críticos que han escrito sobre los aspectos negativos del juego, como los largos tiempos de carga y lo poco amigable que es con jugadores que no estén familiarizados con su tipo de juego. El mayor problema es que Anthem no enseña directamente cómo realizar técnicas como los combos. Las instrucciones están relegadas a un menú bastante escondido en la sección del tutorial.

Cuando un jugador desconoce uno de los sistemas de juego o no sabe bien cómo usarlo, el problema está en el mismo videojuego, el cual no supo enseñar adecuadamente sus mecánicas a toda clase de usuarios. Con su tweet, Ybarra parece desconocer este argumento.

Algunos han sugerido que él puede simplemente estar ‘defendiendo’ los intereses comerciales de Xbox. Después de todo, su empresa está participando en la promoción de Anthem. Este juego está incluido en paquetes con la consola Xbox One.

Aunque en las respuestas a dicho mensaje varios de sus seguidores demuestran no estar de acuerdo con su punto de vista, muchos comparten esta idea. Cuando un crítico habla mal de un título que ellos disfrutan o esperan con ansias, el problema es del crítico que “no es un verdadero gamer” o “la competencia le está pagando por hablar mal del juego”.

Esta filosofía es la misma que hace unos años ayudó al auge de ‘gamergate’: una campaña de acoso contra periodistas y miembros de la industria, especialmente mujeres, que se disfrazó como una crítica contra “la falta de ética en el periodismo de videojuegos”. Esta clase de personas suelen ver a los críticos como escritores elitistas o desarrolladores frustrados cuyo objetivo es hablar mal de los juegos como ‘venganza’ o por seguir una agenda política. Esta es una visión bastante equivocada y malintencionada de esta rama del periodismo. Resulta muy decepcionante que personas importantes de la industria como Mike Ybarra la validen.

Cuando leemos una crítica de un juego, es normal esperar que el escritor haya visto la mayor parte del contenido que ofrece dicho título para poder ofrecer una opinión informada. Pero también hay valor en una crítica que habla de lo que no se pudo ver. Si el crítico dice que no pudo superar una sección, eso nos informa que la dificultad puede ser muy alta para algunos jugadores. Si menciona que no pudo ejecutar consistentemente un movimiento, esto puede ser útil para jugadores que no se sienten muy hábiles con un control. A veces son errores honestos, pero la mayor parte del tiempo esas carencias indican problemas con el mismo juego o elementos que no están al alcance de todos sus posibles compradores.

Afortunadamente existen muchos tipos de críticos de videojuegos en miles de sitios web, canales de YouTube y revistas. Algunos exprimen el juego al 100% antes de analizarlo, otros prefieren enfocarse solo en el contenido principal, dan más importancia a la historia, las mecánicas o la calidad técnica. Incluso hay críticos que solo usan las primeras horas de un juego como base para su escrito. Todas estas diferentes perspectivas y formas de jugar forman opiniones que son valiosas para diferentes tipos de jugadores. Si no les gusta la aproximación que toma un crítico hacia un juego, siempre pueden buscar a otro. No uno que valide la opinión que ustedes quieren que tenga, sino que analice los juegos de una forma compatible con la forma en que ustedes disfrutan de ellos.

Solo asegúrense que esa persona sepa de lo que habla. No todo el que pone su opinión en línea es un buen crítico.